Un camionero sufrió un preinfarto en San Luis y le negaron la internación debido al protocolo de coronavirus. El dueño de la empresa donde trabaja el chofer explicó que "lo sacaron del hospital, se lo llevaron en una ambulancia y lo dejaron sentado en una silla".

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Se trata de Martín Samia, un chofer considerado como trabajador esencial. Él inició su viaje desde Mendoza hacia Buenos Aires. Pero no todo salió muy bien.

Martín comenzó a sentir un poco de dolor en el pecho mientras se encontraba manejando y ese malestar comenzó a empeorar hasta que le empezó a faltar el aire.

Decidió pararse a un costado de la ruta y, unos segundos después, se desmayó en la banquina. Ante esto, varios choferes lo ayudaron.

La ambulancia tardó alrededor de una hora en llegar a Balde, una localidad vecina al límite entre Mendoza y San Luis. Fue allí cuando los médicos lo trasladaron al hospital más cercano y no recibió buenas noticias.

A pesar de que los especialistas del centro hospitalario le diagnosticaron que había sufrido un preinfarto en la ruta, estos se negaron a dejarlo internado por el protocolo de coronavirus. En consecuencia, Samia fue subido a otra ambulancia que lo dejó en Desaguadero, otra pequeña localidad ubicada en el límite entre las dos provincias.

Por su parte, el dueño de la empresa donde trabaja el chofer, Sergio Ollivencia, explicó que: "Lo sacaron del hospital, se lo llevaron en una ambulancia y lo dejaron sentado en una silla en Desaguadero".

Agregó: "El oficial del pueblo me dijo que no podía ingresar a Mendoza por cuestiones de protocolo, pero tampoco nos permitían entrar a nosotros, que lo esperábamos a tres metros con una camioneta para llevarlo a otro hospital".

Al final, pudieron enviar al chofer del camión al hospital Hungría, de Guaymallén, que pertenece a la obra social de Camioneros, pero, de nuevo, rechazaron internarlo y revisarlo en la guardia.