Un violento homicidio ocurrió en la localidad sanjuanina de Pocito, donde un hombre de 20 años fue asesinado de un ladrillazo en la cabeza por su expareja.

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Gabriela Macarena Núñez y Gonzalo Martínez se encontraban separados desde hace un año pero tenían dos hijos en común.

El hecho ocurrió durante la madrugada del sábado mientras festejaban el cumpleaños de uno de sus hijos en la casa de la mujer.

Según indicaron desde el círculo íntimo de Núñez a medio locales, el hombre tenía una perimetral vigente pero en el último tiempo había empezado a frecuentar la casa de su Gabriela.

Al parecer, el detonante habría sido cuando Martínez se enteró de que ella estaba iniciando una nueva relación con otro hombre.

En tanto, los dos hombres se cruzaron la noche del sábado en la reunión familiar y Martínez habría atacado al nuevo novio de la mujer con una botella de cerveza. Después los testigos manifestaron que quiso llevarse a sus dos hijos sin el permiso de la madre y cuando estaba por subirse a un taxi la mujer lo sorprendió por la espalda: lo atacó con un ladrillo.

El cascote impactó de lleno en la nuca del hombre y le provocó una hemorragia interna en el cerebro que lo mató en el acto.

Toda la escena se desarrolló delante del taxista que iba a trasladar a Martínez a su casa, que se convirtió así en el testigo presencial más importante en la causa para establecer cómo fue el ataque.

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En tanto, la nueva pareja de Núñez fue atendido en el Hospital Rawson por las heridas que le provocaron los botellazos durante la pelea con la víctima. La policía solo lo tuvo unas horas demorado tras el incidente, pero lo liberó al constatar que el homicidio tuvo lugar mientras él era atendido por los médicos.

Por su parte, la mujer de 30 años quedó detenida por el asesinato en la comisaría 28va, a disposición del fiscal Francisco Micheltorena de la UFI Nº4 de Delitos Especiales.