Claudio Paul Caniggia negó las acusaciones formuladas por su exesposa, Mariana Nannis, por presunto abuso sexual. Ahora, el exfutbolista acusó por falso testimonio a las amigas de la mujer que dijeron haber presenciado malos tratos y agresiones.

Leé más: El principal sospechoso del asesinato del exrugbier Martín Aramburu fue detenido

Caniggia declaró este miércoles como imputado ante el juez de instrucción Pablo Ormaechea durante unas tres horas, donde refutó las acusaciones que le formuló el fiscal Carlos Velarde.

Especialmente, Caniggia desmintió que los hechos que se le reprochan hubieran ocurrido en las fechas en las que se le formuló la acusación, el 5 de mayo de 2018, tras una fiesta de bodas de conocidos en el hipódromo de Palermo.

Según la acusación, al regresar de la fiesta, Caniggia violó a Nannis en el departamento en el que ambos vivían en el Hotel Faena, de Puerto Madero.

Pero Caniggia describió una serie de argumentos con los que pretendió demostrar que las fechas no coincidían y atribuyó esa supuesta “confusión” a la elaboración de un relato falaz por parte de Nannis y de sus amigas que corroboraron su acusación.

Caniggia denunció por “falso testimonio agravado” a las amigas de Nannis e incluso pidió que fueran detenidas.

El ex futbolista atribuyó la denuncia a una disputa del matrimonio disuelto por la repartición de los bienes gananciales y, en ese sentido, señaló que durante el largo tiempo en que convivieron nunca hubo una denuncia de malos tratos ni, menos aún, agresiones sexuales.

Leé más: Se rechazó la excarcelación de uno de los detenidos de la violación grupal en Palermo

Además, aportó documentación sobre tratamientos médicos con la que buscó descalificar que hubieran tenido como origen supuestos golpes por los que Nannis lo acusa.

Caniggia explicó que algunas lesiones que exhibió en fotografías su ex esposa obedecían, en realidad, a un tratamiento en la piel al que se había sometido y no tenían relación con supuestos golpes.