El defensor oficial de Brenda Uliarte se excusó de asistirla en el patrocinio de su defensa a raíz de la eventual “contraposición de intereses” con su novio Fernando Sabag Montiel, la que ya había asumido la semana pasada.

Juan Martín Hermida se excusó y ahora se evalúa si toma el patrocinio de la joven detenida ayer, el otro defensor oficial Gustavo Kolllman. Si este último la rechaza, será el Ministerio Público de la Defensa quien determine qué defensor tenga Brenda Uliarte.

La joven fue trasladada desde la sede de la calle Cavia hasta la Superintendencia de Investigaciones Federales en la calle Madariaga del barrio porteño de Villa Riachuelo, siempre en dependencias de la Policía Federal, a la espera de cumplir con la indagatoria que este martes tiene previsto tomarle la jueza federal María Eugenia Capuchetti.

La excusación del defensor se debe a que la estrategia que la joven pueda desplegar se da porque podría colisionar con aquella que lleva adelante Sabag Montiel.

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Esto último implica que podría haber acusaciones cruzadas, algo que todavía se desconoce, y por eso la decisión de Hermida de excusarse en las últimas horas.

La hora de la indagatoria aún no está definida ni tampoco el lugar donde se realizará, ya sea en Comodoro Py o bien en instalaciones de Policía Federal.

Por ahora, la jueza ya avanza con el análisis del teléfono celular de la joven el cual fue entregado a la Policía de Seguridad Aeroportuaria para su análisis.

Brenda está detenida en la Superintendencia de Investigaciones Federales y se espera su traslado o decisión para leerle la imputación, la cual se sospecha está vinculada a una participación junto a Sabag Montiel de atentar contra la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner, el pasado jueves en la puerta de su departamento de Recoleta.

Asimismo, la magistrada federal le tomó este lunes declaración testimonial a cuatro amigos de Sabag Montiel y ordenó que se les retuvieran los cuatro teléfonos celulares para analizarlos y determinar si hubo cruce de llamadas con el detenido el día del ataque fallido.