Mendoza, de de

Argentina Crimen de Villa Gesell

Qué declaró la joven que le hizo RCP a Fernando Báez Sosa

Se trata de Virginia Pérez Antonelli, que también había ido al boliche Le Brique y, al salir, fue testigo del ataque al joven de 18 años.

Jueves, 5 de Enero de 2023

Virginia Pérez Antonelli rememoró hoy aquel 18 de enero de 2020, cuando le hizo trabajos de reanimación a Fernando Báez Sosa para tratar de salvarle su vida. “Pudo haber sido solo cinco minutos, pero fue como una hora”, comentó ante el Tribunal que enjuiciará a los rugbiers por el homicidio del joven.

La joven estaba dentro del boliche y había salido porque había muchísima gente. Ahí fue cuando la seguridad del lugar expulsaba por la fuerza a uno de los acusados: Máximo Thomsen. Pérez Antonelli vio que un grupo de personas atacaban a Fernando y ella se acercó cuando él ya estaba en el piso. “Si alguien no tiene consciencia y no respira, hay que hacerle RCP”, dijo ante pregunta de la fiscalía sobre su conocimiento, ya que ella había hecho un curso al respecto en la Cruz Roja.


Leé más: "Estaba Thomsen pegándole al chico que fallece": el escabroso relato de uno de los testigos


Según relató, un amigo de Fernando gritaba pidiendo ayuda y ella se ofreció a hacerle reanimación cardio pulmonar. Lo que hizo unos minutos hasta que llegó el personal policial, que iban tomando la posta para seguir con el intento de salvarle la vida a Báez Sosa. “Yo le sostenía la cabeza a Fernando, le hablaba, le pedía que se quedara conmigo”, recordó Virginia mientras los policías hacían la reanimación.

La fiscalía le preguntó sobre su conocimiento para hacer RCP y ella explicó cómo debía hacerse y en qué circunstancia. También contó que a los policías que le hicieron esas tareas a Fernando, ella les cantaba el ritmo de las compresiones: “Uno, dos, tres, cuatro….”. Pérez Antonelli explicó que ella le hizo apenas unas compresiones a Fernando, pero al ser ella “muy menudita”, sumado a la llegada de los policías, los dejó a ellos.


Leé más: Caso Báez Sosa: los rugbiers entraron sin barbijo por primera vez en el cuarto día de juicio


El abogado de los rugbiers, Hugo Tomei, le preguntó nuevamente sobre sus conocimientos de reanimación y si no había riesgo de hacérselo a una persona a quien podía ocasionarle una lesión al mover el cuerpo: “Es mejor tener a una persona con la costilla rota y viva, que una persona muerta”, le respondió la joven. El letrado desistió de seguir preguntando y terminó la declaración. Antes de dejar la sala, la joven le dio un abrazo primero a Graciela, la mamá de Fernando, y luego a Silvino, su padre.