El ministro de Economía, Luis Caputo, debió reaccionar rápidamente desde Washington para asegurar la continuidad del apoyo financiero.
El ministro de Economía, Luis Caputo, se vio obligado a salir públicamente a calmar a los mercados y a la opinión pública luego de que las declaraciones de Donald Trump generaran un clima de incertidumbre sobre el futuro financiero de Argentina. El revuelo se produjo cuando Trump pareció condicionar el apoyo económico de EE. UU. —incluyendo un posible rescate de US$ 20.000 millones— al resultado de las próximas elecciones legislativas que podría debilitar al gobierno de Milei.
En una rápida movida para desvincular el apoyo bilateral de la política electoral, el equipo económico argentino, junto al canciller Gerardo Werthein, confirmó desde Washington que el gobierno de Trump anunciará este miércoles medidas concretas en materia de inversión y comercio exterior. Este acuerdo busca fortalecer el intercambio entre ambos países y serviría como una señal clara de continuidad.
Caputo atribuyó el malestar a una "interpretación errónea, si se quiere, una confusión", sobre los dichos de Trump. Según el Ministro, la idea de que el respaldo de Estados Unidos dependía exclusivamente del éxito electoral de Milei no se corresponde con lo tratado en las reuniones de alto nivel sostenidas en la capital estadounidense.
“Esperamos que haya anuncios pronto sobre el acuerdo. Eso va a estar pronto”, aseguró el jefe del Palacio de Hacienda tras su encuentro con el equipo de gobierno norteamericano, destacando que el resultado de la reunión fue "diez puntos", pese a la polémica desatada.
La intervención del Ministro de Economía busca contrarrestar el impacto en la plaza financiera, intentando enviar señales de solidez institucional y confianza a los inversores internacionales. La confirmación del acuerdo comercial y la desmentida sobre la retirada de ayuda se perfilan como los principales ejes de la estrategia oficial para estabilizar las expectativas económicas.