La detención de Ronaldinho Gaúcho, uno de los mejores futbolistas de las últimas décadas, sorprendió al mundo. El crack brasileño intentó ingresar a Paraguay con documentos falsos y se encuentra con prisión domiciliaria en un hotel de Asunción junto a su hermano, también imputado. El gran misterio tiene nombre y apellido: Dalia López.

La Fiscalía reiteró este martes a la Policía Nacional una orden de búsqueda y captura contra Dalia López, la empresaria paraguaya que estaba a cargo del proyecto que llevó a Paraguay a Ronaldinho.

López se encuentra prófuga desde la detención hace un mes del exfutbolista y de su hermano Roberto, a quienes hace una semana un juez otorgó el arresto domiciliario. El juez concedió esa medida alternativa tras el pago de una fianza de 1,6 millones de dólares.

La Fiscalía recordó este martes en un comunicado que el 7 de marzo emitió una primera orden de captura y que ante la incomparecencia de López requirió a un juzgado de garantías a declararla en rebeldía.

El Ministerio Público emplazó además al juez del caso a comunicar una orden de captura internacional a Interpol Paraguay para que López se someta al proceso a la causa abierta por producción y uso de documentos públicos de contenido falso, entre otros hechos investigados.

Ronaldinho y su hermano están imputados por la Fiscalía por producción de documentos oficiales de contenido falso, un delito que conlleva hasta 5 años de prisión.

El caso se remonta al pasado 4 de marzo, cuando ambos ingresaron en Paraguay a través del aeropuerto internacional de Asunción con pasaportes paraguayos manipulados.

Ronaldinho tenía previsto apoyar con su imagen a una fundación que organizaba un programa de asistencia social a niños de Paraguay y presidida por López, que los recibió en el aeropuerto.

Los abogados de López aseguraron que la empresaria tramitó pasaportes paraguayos para Ronaldinho y su hermano mediante de una gestoría privada y que desconocía de que estos resultaran falsos.

La defensa de Ronaldinho argumentó entonces que ambos estaban interesados en abrir negocios en Paraguay y que interpretaron esos pasaportes como una especie de regalo.