La ciclista misionera fue suspendida provisionalmente por la UCI y el mendocino reconoció que le inyectó EPO a Paula Quirós sin su conocimiento cuando era su entrenador.
La Unión Ciclista Internacional (UCI) decidió suspender de manera provisional a la ciclista misionera Paula Quirós por haber dado positivo para un control de antidoping, luego de un control de rutina en la previa de un torneo. Según relató Paula, su ex entrenador, el alvearense Ignacio Gili, confesó que le inyectó eritropoyetina, más conocido como EPO, y lo más llamativo fue que lo hizo sin su consentimiento.
“Para mí fue una sorpresa, yo estaba segura que había un error en el comunicado. Luego mi Papá logró comunicarse con él y le comentó que -por error- me había colocado una cosa por otra y que por eso fue positivo”, comentó indignada Quirós.
Al respecto de la sanción y del comunicado comentó que tenía siete días para responder o hacer su descargo: el viernes escribió y mandó a la Unión Ciclista Internacional explicando la situación y además, unos audios de Ignacio Gili, donde confiesa que fue su responsabilidad.
Según explicó Quirós en comunicación con Misiones Online, en el texto ella solicitó que se anulara la sanción y que en caso de recibir, que sea la mínima. En ese contexto, en caso de recibir la sanción más dura no podrá competir en ninguna competencia por cuatro años y también le descuentan resultados obtenidos. Entre las sanciones “leves” podría reducir a seis meses la sanciones o descontar puntos que ya ha obtenido.
“Mi entrenador era la persona en la que yo más confiaba”, dijo Quirós. La oriunda de Apóstoles, actual 52º del mundo en la modalidad Cross Country y la mejor argentina ubicada en el ranking de esa especialidad, se preparaba para la fase final del ciclo olímpico, con miras a la clasificación a Tokio 2021.
Antes de conocer la sanción e informe por parte de la UCI, Gili se había alejado de Quiros "extrañamente", luego de una continuidad de cuatro años.
"La cuestión es que mi papá logró comunicarse ahora y él le dice que fue un error, que no sabe cómo me dio esta sustancia que dio positivo. Ahí me enteré que era cierto, que pedir una contra muestra es inútil. En enero me dio un inyectable que en teoría era vitamina B12 y que ahí fue el error. Para mí es todo muy dudoso. Cuando nos enteramos de todo esto, él empezó a llamarme, a escribirme pidiéndome perdón, diciéndome que se va a hacer cargo porque fue un error suyo o ya no le respondo, no le contesto" explicó Quirós.
Con respecto a los pasos a seguir, Quirós indicó: "Tengo la opción de asumir la responsabilidad, pedir una contraprueba mediante una muestra B o dar explicaciones sobre cómo esa sustancia llegó a mi cuerpo. Mi papá guardó todos los audios que mandó Gili, así que hicimos un descargo y mi entrenador también hizo un descargo".
"Ahora ya no hay sueño olímpico, lo más probable es que ya no pueda competir para clasificar" concluyó Quirós.