Antes de la apertura al público, familiares y compañeros se acercaron para darle el adiós al Diez.
Apenas pasadas la 1 de la mañana, el cuerpo de Diego Armando Maradona llegó a la Casa Rosada. Como escoltas llegó su círculo más íntimo y el grupo de los Campeones de la Selección Argentina de 1986. También se lo vio, muy temprano, a Guillermo Coppola, su amigo e histórico representante.
En el grupo "Del "86" se pudo ver a Oscar Ruggeri y su mujer Nancy, Nery Pumpido, Oscar Garré, el masajista de aquel grupo Galíndez. Jorge Burruchaga se llegó a Balcarce 50 un poco más, tarde, luego que culminará el partido que Independiente le ganó a Fénix. Sergio Goycochea fue uno de los primeros en llegar.
Ya entrada la madrugada se acercaron a la Casa Rosada, jugadores de Boca del plantel actual, sus amigos Carlos Tevez y el delantero Ramón "Wanchope" Ábila, y también Rolando Schiavi. También un grupo que vino de Rosario, integrado por el ex Capitán de la Selección Argentina, Javier Mascherano, Gabriel Heinze y Maxi Rodríguez, los tres integrantes de aquel plantel de Sudáfrica 2010 que Diego comandó desde la dirección técnica.
También apareció en el velorio íntimo Martín Palermo, que fue por las suyas y la llamativa presencia de Rafael Di Zeo, capo de "La 12".
Del círculo familiar del Diez, dijeron presente, además de Claudia y Dalma y Giannina, Verónica Ojeda y Dieguito Fernado, y también Jana Maradona, la última en ingresar al clan. Las ausencias más notables fueron las de Diego Jr, que vive en Italia y de Rocío Oliva, a quién la familia, enemistada con ella, le negó la entrada y la envío a hacer la cola como al resto de la gente para ingresar desde la mañana.
El presidente de la FIFA, el ítalo-suizo Gianni Infantino, quiso "viajar en vuelo privado" a la Argentina para despedir a Diego Maradona en su velorio, pero los "tiempos" del cortejo fúnebre, que según lo resuelto por la familia se extendería hasta las 16, "impidieron que concrete su viaje", según confirmaron fuentes oficiales.
Tras conocerse la noticia sobre el deceso del astro del fútbol mundial, Infantino calificó el día de ayer como "un día increíblemente triste" por la perdida de alguien que hizo algo "único" por el fútbol y que merece "gratitud eterna".
"Hoy es un día increíblemente triste. Nuestro Diego nos ha dejado. Nuestros corazones, los de todos quienes lo queríamos por lo que era y por lo que representaba, han dejado de latir por un instante. Nuestro silencio, nuestras lágrimas, nuestro dolor es lo único que sentimos en este momento", señaló ayer Infantino en la web de FIFA.
"Siempre lo dije y lo repito ahora, más convencido que nunca: lo que Diego ha hecho por el fútbol, para que todos nosotros nos enamoremos del deporte rey, es único", sostuvo, según reprodujo la agencia alemana de noticias DPA.
"Es, tal como él, simplemente inmenso. Diego merece nuestra gratitud eterna por habernos maravillado con su talento increíble y sí, por haber sido único e inimitable: por haber sido Diego Armando Maradona, una leyenda, un héroe y un hombre", añadió Infantino.