Mendoza, de de

Deportes tokio 2020

Neisi Dajomes hace delirar a Ecuador

La levantadora de pesas le dio la segunda medalla dorada a su país, la primera conseguida por una mujer. Historia en estado puro para una luchadora de la vida.

Lunes, 2 de Agosto de 2021

Neisi Dajomes se alzó con el oro de halterofilia en la categoría de -76 kg de los Juegos Olímpicos. Es la primera mujer ecuatoriana en ganar una medalla Olímpica. Y es la segunda medalla dorada para el país en Tokio 2020, tras la consagración de Richard carapaz en ciclismo.

Dedicó el triunfo a la memoria de su madre y su hermano, con quien se inició en este deporte

Tras colgarse la medalla de oro en lo más alto del podio Olímpico, la ecuatoriana Neisi Dajomes descubrió la palma de su mano izquierda y con el ramo de flores señaló los nombres que había pintado. ‘Mamá y Hermano’. Era por ellos por quienes había llegado hasta ahí y era de ellos de quien más se acordaba.




Dajomes se inició en la halterofilia siguiendo los pasos de su hermano Javier. Cuando ella tenía 11 años, fue a verlo entrenar por curiosidad y los preparadores le ofrecieron probar también a ella. Empezó con un palo de escoba, para ir aprendiendo la técnica, y a la semana siguiente con una barra de 10 kilos. Su rápida progresión convenció a los entrenadores de que tenía futuro este deporte.

Pero el camino no siempre fue sencillo. Dajomes sintió muchas dudas en sus comienzos y llegó a dejarlo brevemente porque algunas personas consideraban que la halterofilia no era un deporte para mujeres y le iba a hacer un cuerpo muy masculino. Su entrenadora consiguió que volviera al gimnasio durante una semana y esa semana ya son más de una década y dos Juegos Olímpicos.




Dajomes participó en su primera competición internacional con 13 años. Fue en un Campeonato del Mundo celebrado en Perú en 2011, donde terminó en octava posición. Esa progresión vertiginosa de la que hablaban sus entrenadores pudo verse también en este escenario, pues un año después quedó segunda y al siguiente, en 2013, campeona del mundo en categoría sub 17.

El punto de inflexión en su carrera llegaría en 2015, cuando logró su primera medalla internacional en categoría absoluta con una plata en los Juegos Panamericanos de 2015. El resultado puso a la haltera ecuatoriana en el camino de los Juegos Olímpicos de Río 2016, y aunque no pudo brillar al mismo nivel en su primer Mundial absoluto (terminó 10º), celebrado unos meses más tarde, abrió una ventana a su futuro.

En 2016, sólo unos meses antes de su debut Olímpico, Dajomes conquistó la primera de las tres coronas mundiales en categoría júnior. Fue en Tiflis, Georgia, donde además compartió competencia con su hermana Angie Palacios. Su decisión de subir en 2017 al peso de -75 kilos, donde hoy sigue compitiendo, fue en parte para dejarle espacio.




Neisi Dajomes fue la deportista más joven de la delegación Olímpica de Ecuador en Río 2016. Apenas dos meses antes había cumplido los 18 años. Pero el único momento en que reveló su edad fue cuando, sosteniendo más de 100 kilos por encima de su cabeza, sacó la lengua para celebrar su actuación: quedó primera del Grupo B y séptima de la competición para volver a casa con un diploma Olímpico.

Tras soltar la barra de hierro, Neisi Dajomes se arrodilló, juntó las manos y miró al cielo al borde del llanto. La haltera ecuatoriana acababa de conquistar el primer oro para Ecuador en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y su primer recuerdo fue de nuevo al cielo. A su hermano, fallecido en 2018, y a su madre, que había fallecido solo unos meses atrás.

"Yo creo que uno nunca supera la pérdida de una madre, y al menos uno como deportista muchas veces tiene que, a pesar de las circunstancias que le pasan personal, tiene que seguir adelante, porque es algo que uno se lo ha propuesto, y tiene que seguir y cumplir sus sueños", confesó en declaraciones a Radio CRE.

Para ellos fue también el recuerdo desde lo más alto del podio de Tokio 2020. Con lágrimas en los ojos y el oro al cuello, el primer metal Olímpico para una deportista ecuatoriana, Dajomes abrió la mano y mostró los destinatarios de esa medalla. Mamá y Hermano.