Argentina-Brasil es un fenómeno que inunda las calles de San Juan de alegría y pasión futbolera por encontrarnos con aquel rival con el que la selección nacional se midió el día en que se consagró campeón de América. 

La euforia de la gente no quedó escondida: una fila de cuatro kilómetros se instaló ayer para sacar las entradas físicas para el clásico de América del Sur. Sin embargo, no es la única espera que se hizo eterna: cuando el sitio para comprar las entradas de forma virtual se habilitó, cayó a lo pocos minutos por la gran cantidad de internautas que accedieron. 

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Se registró una fila virtual superior a los 65.000 usuarios en el sitio www.autoentrada.com, pues ningún hincha se quiere perder el encuentro por la 14° fecha de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Qatar. 

En tanto, en las afueras del autódromo El Villicum muchas personas llevaron reposera, comida, y hasta elementos para dormir mientras hacían fila y conseguir una entrada para ver el enfrentamiento en el estadio Bicentenario. A la mañana de este lunes solo quedaban unas 4.000 localidades disponibles de las 18.000 puestas a la venta.

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Argentina recibirá el martes a Brasil desde las 20.30, con arbitraje del uruguayo Andrés Cunha, en un superclásico que puede determinar su clasificación al Mundial Qatar 2022 cuatro fechas antes del término de las Eliminatorias.