Comenzó la liga ucraniana sin público en las tribunas y con refugios a menos de 500 metros de los estadios.
En el Olimpijs"kyj de Kiev, en el mismo estadio donde se jugó la final de la Euro 2012 y la definición de la Champions League entre Real Madrid y Liverpool. Fue el lugar del partido entre Shakhtar Donetsk y Metalist 1925. Por supuesto, a puertas cerradas
Nadie ha sido capaz por ahora de acallar los cañones en Ucrania, pero el fútbol lo intentará. La liga ucraniana arrancó este martes, en víspera de que se cumplan seis meses de combates entre ucranianos y rusos. Además del duelo de iniciación entre Shakhtar Donetsk-Metalist (0-0), también será el turno de Chornomorets Odessa-Veres Rivne, Zorya-Vorskla y Kolos Kovalivka-Krybvas por la primera fecha de la Premier League local. "Esta es una iniciativa única en la historia.Fútbol contra la guerra en condiciones de guerra. Fútbol por la paz", aseguró Andréi Pavelko, presidente de la Asociación Ucraniana de Fútbol.
El Shakhtar, salió al campo con nueve jugadores ucranianos y sólo dos extranjeros, el centrocampista croata Durasek y el lateral brasileño Taylor, fichado el mismo lunes procedente del PAOK, que lo cedió por una temporada. Debido a la estampida de los jugadores brasileños a ligas europeas, el Shakhtar ha perdido a sus principales estrellas, que aprovecharon el permiso de la FIFA y la UEFA para romper sus contratos. También saltaron al campo en la capital ucraniana viejos conocidos como Stepanenko o Matviyenko, internacionales con la selección de su país, que no disputará el Mundial de Catar, ya que cayó en la repesca ante Gales.
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Por parte visitante, el Metalist, un club fundado en 2016, no puso en el campo de juego más que futbolistas ucranianos, entre los que el más destacado fue su arquero, Oleg Mozil.
El anterior campeonato ucraniano también comenzó en verano (europeo), pero nunca se llegó a reanudar tras tres meses de receso invernal debido al inicio de la campaña militar rusa el 24 de febrero pasado. “Gracias a Dios y al Ejército ucraniano que el fútbol se reanuda en nuestro país. Gracias al deporte podremos mostrar la fuerza de nuestra nación”, comentó Román Grigorchuk, técnico del Chernomorets Odessa (mar Negro). Por su parte, dos equipos se han caído de la lista. Por obvias razones, el Mariúpol no disputará la ligaucraniana porque esa ciudad portuaria fue tomada por las tropas rusas. Tampoco será de la partida el Chernígov, una de las ciudades más castigadas en la campaña militar rusa.
Pavelko no anunció hasta el pasado 12 de agosto el inicio del campeonato. “El principal problema de los preparativos de la liga es la seguridad de sus participantes”, admitió. Explicó que la Federación recibió un protocolo de seguridad para la celebración del campeonato consensuado entre el Ejército, las fuerzas de seguridad y las autoridades locales.
Igual que para el resto de civiles ucranianos, la palabra clave para los futbolistas es la seguridad. De hecho, aún no se conocen ni los horarios ni los estadios en los que se disputarán los encuentros de la segunda jornada. No es improvisación. Es seguridad...
Lo que se sabe con seguridad es que los partidos se disputarán sin público y con la presencia de un importante contingente militar. En caso de que suene la alarma aérea, los participantes en el partido deberán cobijarse en los refugios que serán habilitados con ese fin a escasa distancia de cada cancha. El protocolo reza que el refugio no debe encontrarse a más de 500 metros del estadio. Los futbolistas y demás personal han sido adiestrados en caso de alarma. "¡Atención!¡Alarma aérea!¡Pedimos a todos que acudan al refugio!", es el guión que deben repetir los altavoces en caso de alarma aérea.
"Celebrar torneos de fútbol durante la guerra no tiene que ver solo con el deporte. Se trata de demostrar el coraje de nuestra gente, su espíritu indomable y su deseo de victoria", aseguró Pavelko.
La liga 2021-22 se suspendió oficialmente en abril con la declaración de la ley marcial. El Shakhtar, líder en ese momento, fue declarado ganador, pero no se repartió ninguna copa. “Mis felicitaciones tanto al presidente de la Asociación como al presidente del país, Volodímir Zelenski, por su decisión de seguir jugando al fútbol. El fútbol es parte de la vida de cada sociedad e incluso en las actuales condiciones la gente lo echaba de menos”, comentó Luciano Luchi, jefe del comité de árbitros de la liga ucraniana.
La primera jornada fue inaugurada por el campeón, el Shakhtar Donetsk, que no disputa los partidos de casa en su estadio desde 2014 por la sublevación armada prorrusa en el Donbás. Mucho ha llovido en Donetsk desde que recibiera en 2012 la Eurocopa. Los Mineros recibieron al Metallist 1925 en Leópolis, la capital del oeste del país y destino de millones de refugiados en los últimos meses.
El Metallist también sabe de primera mano lo que es conflicto, ya que su ciudad, Járkov, ha sido una de las más afectadas por los bombardeos rusos, al ser vecina del Donbás, epicentro de los combates. Así es la realidad de cualquiera de los equipos ucranianos: teñida por la guerra.
La liga la disputarán 16 equipos. El otro equipo del Donbás, el Zorya de Lugansk, jugará en Zakarpatia (Oeste), que recibirá dos partidos en la primera jornada, ya que es considerada una de las regiones más seguras del país. En la misma línea, el resto de encuentros se disputarán en Kiev, cuyo asalto por parte de las tropas rusas se descarta por el momento.
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“Estamos agradecidos y orgullosos de los defensores de nuestro país. Este campeonato es una seria prueba sobre la calidad del trabajo de todos los clubes y los servicios correspondientes que garantizan el funcionamiento y la seguridad de los partidos”, comentó Grigorchuk.
En cambio, los partidos europeos no se jugarán en territorio ucraniano. Recientemente, el Dinamo Kiev recibió en Polonia (Lodz) al Benfica (0-2) en la fase previa de la Champions League. Lo mismo ocurre con el Dnipró-1 de Dniepropetrovsk, el Zorya y el Vorskla de Poltava. El Shakhtar, que está clasificado directamente para la Liga de Campeones, también tendrá que disputar los partidos de casa en el extranjero durante la fase de grupos, cuyo sorteo se celebrará esta semana.
Desde que estalló el conflicto en 2014, el Shakhtar, equipo patrocinado por el hombre más rico del país, Rinat Akhmétov, ha ganado cinco títulos de liga y el Dinamo, tres.
Ucrania reconoció este lunes haber perdido a cerca de 9.000 soldados desde el inicio de la invasión rusa hace seis meses, en un conflicto sin visos de terminar. "Cerca de 9.000 héroes han muerto", declaró el comandante en jefe del ejército ucraniano, el general Zaluzhny, durante una concentración pública.
La declaración del responsable del ejército es la primera que se hace sobre las pérdidas militares de Kiev desde abril. El miércoles, Ucrania celebrará el día de su independencia, que este año coincide con los seis meses de la invasión rusa.
"Creo que estamos ante una guerra de gran escala", aseguró el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, durante una rueda de prensa en el norte de España en la que anunció que la Unión Europea debatirá crear un gran programa "de entrenamiento y de ayuda a la organización" del ejército ucraniano.
Tras fracasar en su intento de tomar Kiev, Moscú centró su ofensiva en el sur y en el este del país, donde trata de controlar la totalidad del Donbás, parcialmente controlado por separatistas prorrusos desde 2014.
fuente Ole