Este gran sueño, se mantuvo lejos de las manos argentinas porque se enfrentaron a dificultades con las jugadas de línea y el agrupamiento de Nueva Zelanda, que avanzaron terreno con gran potencia. A pesar de tener el control del territorio, el equipo albiceleste estuvo en gran desventaja en términos físicos. Con el tiempo, los All Blacks agotaron a los jugadores de Michael Cheika.

En un primer momento, fue una fase inicial muy demandante para Los Pumas, quienes comenzaron con buenas acciones pero gradualmente se vieron superados por la fuerza de los All Blacks, un rival muy eficiente. 

A pesar de un prometedor comienzo con buenos movimientos, el equipo de Michael Cheika no pudo hacer frente a la contundencia del equipo neozelandés, que sentenció el partido al inicio de la segunda mitad y demostró ser ampliamente superior durante todo el encuentro, especialmente en términos físicos. Ahora, el equipo argentino buscará la medalla de bronce enfrentando al perdedor del enfrentamiento entre Sudáfrica e Inglaterra.

Los Pumas no lograron resistir el dominio de los All Blacks y sufrieron una derrota en las semifinales del Mundial de rugby, siendo esta la tercera vez en su historia. Ahora, el equipo argentino aspira a igualar su mejor desempeño en este tipo de competiciones, que fue el tercer puesto logrado en la edición de 2007 en Francia.