El partido se disputó en el estadio Juan Gilberto Funes, de San Luis, escenario neutral para este crucial duelo.
Independiente Rivadavia protagonizó una noche de infarto en la Copa Argentina. El equipo mendocino "se impuso en el último minuto ante Central Córdoba de Rosario" en un vibrante encuentro correspondiente a los octavos de final del certamen. La victoria, cargada de épica, desató la euforia de la "Lepra" y de sus hinchas, que celebraron el pase a la siguiente instancia de la copa nacional.
El partido se disputó en el estadio Juan Gilberto Funes, de San Luis, escenario neutral para este crucial duelo. Los goles que le dieron la clasificación a Independiente Rivadavia fueron obra de Iván Villalba y Mauricio Cardillo, este último con una aparición decisiva sobre el final. Por el lado del elenco rosarino, el autor del único tanto fue Facundo Marín, quien había ilusionado a Central Córdoba con la posibilidad de avanzar.
Con esta emocionante victoria, Independiente Rivadavia ya tiene asegurado su lugar en los cuartos de final de la Copa Argentina. Ahora, la "Lepra" se prepara para un nuevo desafío y deberá esperar por su próximo rival, que saldrá del cruce que "protagonizarán San Lorenzo y Tigre el sábado 2 de agosto", en la cancha de Deportivo Morón. La expectativa por conocer al próximo oponente ya es grande en el seno del plantel y la hinchada.
El inicio del encuentro mostró a "Independiente Rivadavia comenzó el partido con intensidad", buscando rápidamente la portería rival. El equipo dirigido por Alfredo Berti generó dos aproximaciones claras en los primeros minutos, una con Álex Arce y otra con Sebastián Villa. Un remate con poca potencia del paraguayo y un mano a mano del capitán con el guardameta rival en el área chica, fueron las primeras señales de peligro de la "Lepra".
Con persistencia y algunos cambios tácticos a lo largo del desarrollo del juego, "Independiente Rivadavia insistió en el área rival y tuvo un cabezazo de Villalba que se fue cerquita", anunciando lo que vendría. Central Córdoba de Rosario también tuvo sus chances, incluyendo "una de las últimas ocasión del tiempo regular con un remate desde el vértice del área que se fue besando el parante izquierdo de Centurión", manteniendo el suspenso hasta los instantes finales.
La definición no pudo ser más dramática. Tras una falta, siguió un centro al área que derivó, "en el último minuto, en un cabezazo de Mauricio Cardillo", quien había ingresado hacía poco. El balón se metió en el arco de Colombo, culminando una "épica clasificación a cuartos de final" que quedará grabada en la memoria de los fanáticos de Independiente Rivadavia.