Mendoza, de de

Deportes Fútbol

Así podría ser el camino de la Selección Argentina hasta la final del Mundial 2026

El cuadro de Lionel Scaloni ya conoce cómo podría desarrollarse su periplo por la máxima competencia de fútbol, con un filtro muy duro en semifinales y la posibilidad de un clásico sudamericano inédito.

Viernes, 5 de Diciembre de 2025

La euforia y el optimismo ya se instalaron en el corazón de los fanáticos argentinos de cara al Mundial 2026. Con el fixture ya definido, los seguidores más entusiastas de la "Scaloneta" ya comenzaron a desgranar el cuadro de la competencia, sacando cuentas sobre los potenciales rivales del conjunto de Lionel Scaloni. Para que el camino sea más "favorable" —aunque no exento de peligros—, el equipo debería asegurarse el primer puesto del Grupo J, que comparte con Austria, Argelia y Jordania.

El primer gran filtro: de Octavos a Cuartos de Final

Al clasificar primera, la Albiceleste conseguiría un beneficio clave: evitar a selecciones poderosas como España y Francia hasta una hipotética gran final. De esta forma, en los 16avos de final el rival de Argentina podría ser el segundo del Grupo H, donde aparece Uruguay, Cabo Verde o Arabia Saudita. Superada esa instancia, los octavos enfrentarían al vencedor de los cruces entre los segundos de las zonas D y G, donde se barajan nombres como Paraguay, Australia, Irán o Egipto.

Sin embargo, el peso de los rivales volvería a sentirse con fuerza en los cuartos de final. Aquí, el escollo más complicado en el camino sería Portugal, que probablemente venga con un cuadro menos desgastante. Aunque también podría darse un choque con selecciones de cuidado como Colombia o Canadá.

El verdadero desafío se vislumbra en las semifinales, el tramo donde la historia se pone realmente seria. Si la lógica deportiva acompaña el desarrollo del cuadro, el cabeza de serie del grupo L que se pararía enfrente sería nada más y nada menos que Inglaterra. De concretarse este enfrentamiento, sería la reedición de un clásico con muchísima historia, que se remonta a los épicos cruces de 1966, 1986, 1998 y 2002.

Si la Selección Argentina logra superar este escollo histórico, la final de la Copa del Mundo podría deparar el partido más soñado para el continente. Existe la posibilidad de que Argentina choque por la gloria máxima contra Brasil, un clásico sudamericano que jamás se ha jugado en una definición mundialista. La alternativa, de no mediar el clásico, sería enfrentar a las potencias europeas España o Francia, dependiendo de cómo se defina la otra llave del cuadro.