El beneficio alcanzará a quienes perciban ingresos mensuales de hasta $384.305, monto que se alcanzará con la suma del bono y el haber base.
El Gobierno nacional oficializó este jueves el pago de un nuevo bono extraordinario de $70.000 para jubilados y pensionados que cobran el haber mínimo. La medida fue establecida mediante el Decreto 523/2025, publicado en el Boletín Oficial con las firmas del presidente Javier Milei y sus ministros. El beneficio alcanzará a quienes perciban ingresos mensuales de hasta $384.305, monto que se alcanzará con la suma del bono y el haber base.
Durante agosto, la jubilación mínima será de $314.305,37, tras aplicar un aumento del 1,6% determinado en función del índice de inflación correspondiente al mes de junio. Con el bono, quienes cobran el haber mínimo recibirán un total de $384.305. Esta ayuda extraordinaria tiene como objetivo compensar, al menos en parte, la pérdida del poder adquisitivo frente a la inflación.
Para los jubilados que reciben haberes por encima del mínimo pero por debajo de los $384.305, el bono se otorgará de manera proporcional. Por ejemplo, quienes cobren $350.000 recibirán una diferencia de $34.305, de modo que todos los beneficiarios alcancen el mismo tope total durante agosto. La suba efectiva para quienes ya cobraban el bono en julio es de apenas $5.000.
En los considerandos del decreto, el Gobierno justificó esta medida señalando los efectos negativos de la inflación sobre los ingresos de los adultos mayores. Según el texto oficial, la fórmula de movilidad jubilatoria vigente desde marzo de 2021 —establecida por la Ley N° 27.609— presentaba "graves inconvenientes", ya que no contemplaba adecuadamente la variación de precios y provocaba un desfase entre la evolución económica y los haberes previsionales.
El Ejecutivo remarcó que esa brecha derivó en la necesidad de aplicar “ayudas económicas extraordinarias” para sostener el poder de compra de los sectores más vulnerables. Desde el inicio del mandato de Javier Milei, en diciembre de 2023, ya se otorgaron múltiples bonos para los jubilados: dos pagos de $55.000 en los primeros meses del año y, a partir de marzo, un refuerzo mensual de $70.000 que se mantiene hasta la actualidad.
Aunque este nuevo bono representa un alivio momentáneo, la actualización mensual de los haberes jubilatorios sigue estando en el centro del debate. Organizaciones de jubilados y expertos en previsión social reclaman una reforma estructural que garantice ingresos dignos y sostenibles a largo plazo, frente a una inflación que continúa erosionando la capacidad adquisitiva.