Tras varios pedidos, la Justicia escuchó a Mauro Icardi y el jugador podrá convivir con sus hijas durante siete días en su casa.

Como decía el escrito, se presentó en el Chateau Libertador a las 11 de la mañana para buscar a sus hijas junto con sus mascotas y sin la compañía de su novia, La China Suárez.

Icardi ingresó con su auto al edificio para buscarlas e intentar un acercamiento, después de 105 días sin convivir con ellas.

Habrá que ver si esta vez cumple con el pedido de las nenas de poder pasar un tiempo a solas con él. El escrito del juez indica que en los primeros días no podrá estar Eugenia Suárez, pero luego se incorporará junto a sus hijos para ensamblar las familias, como es el deseo del jugador. Las nenas deben bajar del departamento con su niñera, pero aún no lo hicieron y, al parecer, sería la madre quien no las deja bajar.