Ucrania intenta obtener armas ofensivas para contrarrestar la invasión rusa.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, recibió en Kiev a los secretarios de Estado y de Defensa de los Estados Unidos, Antony Blinken y Lloyd Austin, con el foco en la provisión de armamento para contrarrestar la ofensiva rusa.
"Los estadounidenses están en Kiev hoy. En este momento están hablando con el presidente", declaró en una entrevista difundida por YouTube un consejero de Volodimir Zelenski, Oleksiy Arestovich.
Se trata del primer encuentro del presidente ucraniano con altos funcionarios de la administración a cargo del demócrata Joe Biden en su país desde que empezó la invasión rusa, el 24 de febrero último.
Las conversaciones del domingo debían tratar principalmente sobre el abastecimiento de armas estadounidenses a Ucrania, indicó el sitio DW.
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"La amistad y la colaboración entre Ucrania y Estados Unidos son más fuertes que nunca", tuiteó Zelenski, sin dar más detalles sobre el encuentro que se desarrollaba.
Por su parte, Arestovich reiteró que el deseo del gobierno ucraniano es obtener "armas ofensivas". "Mientras no podamos contraatacar, habrá un "nuevo Bucha" todos los días", lanzó, en alusión a esa ciudad del noroeste de Kiev convertida en símbolo de las atrocidades cometidas durante la ocupación rusa de la región en marzo.
"Los representantes estadounidenses no vendrían aquí si no estuvieran dispuestos a donar (armas)", consideró el funcionario.
El sábado, Volodimir Zelenski se había declarado "agradecido" con la administración estadounidense por la ayuda aportada a Ucrania, pero repitió que quería obtener "armas todavía más pesadas y potentes" para hacer frente al ejército ruso.
Oleksiy Arestovich indicó además este domingo por la noche que "las líneas de defensa estaban a punto de hundirse" en Mariúpol, la ciudad portuaria del sur de Ucrania controlada en gran parte por las fuerzas rusas, y donde los últimos combatientes ucranianos se han atrincherado -junto a civiles- en una gran acería, Azovstal.