Las autoridades de Transnistria, una región separatista moldava ubicada entre el río Dniéster y la frontera entre Moldavia y Ucrania, indicaron que entre el domingo y este lunes fueron blanco de un ataque ruso en su territorio.

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Según detallaron, un edificio gubernamental de la capital, Tiraspol, fue el centro de las explosiones. Con esto, Transinistria se convirtió en el tercer país involucrado desde el comienzo de la guerra en Ucrania.

El viernes pasado, el Ejército ruso había ampliado sus objetivos en Ucrania y había anunciado que planeaba formar un corredor por el sur de Ucrania para poder acceder a Transnitria, y según informaron este lunes desde el Centro de Prensa del Ministerio del Interior de Transnistria, en torno a las 17 (hora local) se detectaron varias explosiones en la intersección de las céntricas calles de Karl Marx y Manoilov.

Desde dicha cartera publicaron detalles del incidente y señala que las primeras investigaciones apuntan a que los disparos se realizaron desde un lanzacohetes RPG, un dispositivo antitanque portátil de origen soviético. En tanto, el ministerio del Interior confirmó que no hay heridos ni fallecidos.

La explosión dejó ventanas rotas en las plantas superiores y los alrededores del edificio ministerial están acordonados ahora por la Policía.

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