Aludes causados por intensas lluvias cobraron al menos 29 víctimas fatales en el estado de Pernambuco, en el noreste de Brasil. En el estado de Alagoas, también en la región, otras dos personas fallecieron el viernes arrastradas por el fenómeno climático.

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Más de mil personas se han visto forzadas a dejar sus hogares debido a las inundaciones en Pernambuco, según informaron las autoridades de la defensa civil a través de Twitter.

El secretario ejecutivo de la agencia de defensa civil en aquel estado, el teniente coronel Leonardo Rodrigues, precisó en un video en Instagram que unas 32.000 familias vivían en áreas en riesgo de inundaciones o deslaves en el territorio afectado.

Asimismo, las escuelas en la ciudad de Recife abrieron sus puertas para albergar a los desamparados.

En Alagoas, el gobierno señaló que 33 municipalidades han declarado el estado de emergencia por los efectos de los aguaceros en los últimos días.

En tanto, el presidente brasileño Jair Bolsonaro informó en Twitter que cuadrillas del Ministerio de Desarrollo Regional y funcionarios de las Fuerzas Armadas serán enviados a Pernambuco y a Alagoas para brindar “ayuda de alivio y humanitaria”.