El presidente de Chile, Gabriel Boric, anunció el pasado jueves un paquete con siete medidas que buscan dar seguridad económica a las familias en el país y que considera aportes monetarios directos.

"Estamos viviendo momentos difíciles, el primer semestre va a ser desafiante y el alza del costo de la vida es un desafío para todas las familias chilenas", señaló el mandatario en una rueda de prensa.

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Boric puntualizó que buscan hacerse cargo de este escenario económico, primero con políticas públicas responsables para detener el alza inflacionaria, como también con recursos disponibles para las familias.

"Este año vamos a trabajar aún con más fuerza para garantizar derechos, para asegurar su seguridad económica, social y ciudadana, que sabemos que es su prioridad", dijo.

El mandatario chileno precisó que el paquete será enviado al Congreso para su pronta aprobación.

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"Espero que más allá del clima crispado que se produce producto de las disputas políticas cotidianas, seamos capaces de poner por delante los problemas y urgencias de nuestro pueblo".

Dentro de las siete medidas destacan el Aporte Familiar Permanente, que se entrega en marzo y cubrirá a más de 1,5 millones de hogares, y la creación del Bolsillo Familiar Electrónico, que contempla una transferencia estatal por ocho meses para ayudar a enfrentar el alza del costo de la vida de las familias.

También entregarán la Asignación Familiar; el Subsidio Único Familiar; establecerán un convenio de rebaja de medicamentos; una ampliación del programa de alimentación para estudiantes, y la creación de un fondo de garantías para créditos en el sector construcción, que deberá ser aprobado por el Congreso del país sudamericano.

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La economía chilena retrocedió un 2,5 por ciento interanual en noviembre pasado, la mayor caída desde febrero de 2021 y la tercera baja mensual consecutiva, resultado negativo atribuido a la caída del comercio y la industria manufacturera, informó el martes pasado de manera preliminar el Banco Central de Chile.