Además, el Sumo pontífice les exigió a los obispos que no cubran nada referido.
Este domingo, el papa Francisco reiteró su intensa consternación por los múltiples casos de abuso sexual asociados a la Iglesia y solicitó a los obispos “que no los encubran y que se juzgue a quienes son responsables”.
Lo hizo en el contexto de una misa llevada a cabo en el estadio "Rey Balduino" en Bruselas, frente a unas 30.000 personas. Los numerosos casos de menores agredidos en Bélgica por integrantes de la Iglesia mantienen en estado de shock a la población, según informó la Agencia Noticias Argentinas.
“Pensamos en lo que ocurre cuando los pequeños son escandalizados, heridos, maltratados por quienes deberían cuidarlos, en las heridas de dolor e impotencia en primer lugar en las víctimas, pero también en sus familias y en la comunidad”, dijo Francisco.
“Con la mente y el corazón vuelvo a las historias de algunos de estos pequeños que conocí anteayer. Los escuché, sentí su sufrimiento como abusados y lo repito aquí: en la Iglesia hay lugar para todos, todos, pero todos serán juzgados y no hay lugar para el abuso, no hay lugar para encubrir el abuso”, agregó.