Es millonario, tiene 37 años, nació en Miami y se educó en Harvard: enfrentará a Luisa González, apoyada por el movimiento indígena del país sudamericano.
Daniel Noboa, un millonario empresario de 37 años nacido en Miami y educado en Harvard, buscará ser reelecto mañana presidente de Ecuador en un reñido balotaje presidencial, en el que enfrentará a su rival opositora, Luisa González.
Noboa, quien se autodefine como un político de centro-izquierda, aspira gobernar el país sudamericano por cuatro años más, tras ganar de manera sorpresiva la Presidencia en los comicios anticipados de 2023.
Entonces, Noboa, quien jugó el rol de participante "outsider" (inusitado), se alzó con el triunfo y se convirtió en el presidente más joven en la historia de Ecuador, define la agencia de noticias Xinhua.
Asumió el poder el 23 de noviembre de 2023 para gobernar 18 meses, hasta completar el mandato que no terminó su predecesor Guillermo Lasso (2021-2023), quien disolvió la Asamblea Nacional (Parlamento) y llamó a elecciones generales adelantadas en medio de una crisis política.
Su experiencia al frente de la Presidencia es la principal carta de presentación de Noboa de cara al crucial balotaje del próximo domingo, en el que más de 13,7 millones de ecuatorianos decidirán el rumbo que tomará el país, agobiado por la peor crisis de seguridad de su historia.
Noboa, del Movimiento Acción Democrática Nacional (ADN) y su contendiente, Luisa González, del Movimiento izquierdista Revolución Ciudadana (RC), sellaron una primera vuelta ajustada el pasado 9 de febrero con una diferencia de 16.746 votos a favor del mandatario.
De cara al balotaje, varias encuestas de intención de voto reflejaron estrechos márgenes entre ambos candidatos y sin un claro favorito, lo que, según analistas, avizora una pelea voto a voto.
En un escenario político bastante polarizado, Noboa combinó su rol de presidente y candidato lo que le permitió construir una narrativa de continuidad que se ha reforzado con su nuevo eslogan de campaña: "Ecuador para adelante".
El mandatario, un "millennial", deportista y de pocas palabras, es muy activo en redes sociales, las cuales usó como plataforma para acercarse a los votantes, sobre todo, a los indecisos, cuyos votos podrían definir la elección.
En la semana previa al balotaje, Noboa reajustó su estrategia de campaña realizando recorridos en territorios prioritarios para captar nuevos apoyos y se reunió con sectores campesinos, agrícolas y productivos, además de que buscó diferenciarse de su adversaria.
Se apoya en su madre y su segunda esposa
Su campaña cuenta, además, con dos figuras clave: su madre, la legisladora y médica, Annabella Azin, y su segunda esposa, Lavinia Valbonesi, "influencer" (personalidad en redes sociales) y nutricionista de 26 años, que lideran acciones sociales en zonas empobrecidas.
El popular mandatario ha reconocido que se enfrenta a una
segunda vuelta "peleada" y apeló al voto de los indecisos en provincias clave.
Ecuador se juega el futuro en esta elección
En una reciente concentración de simpatizantes el pasado 6 de abril en el coliseo River Oeste de la ciudad de Guayaquil (suroeste), Noboa afirmó que Ecuador se juega su futuro en esta elección y señaló que su proyecto político busca la transformación estructural del país.
"Nosotros vamos a reformar la Constitución (de 2008), vamos a refundar a un Ecuador que necesita cambio, que necesita justicia, que necesita oportunidades laborales y conexión con el resto del mundo", señaló. Además, reafirmó su política de mano dura contra el crimen organizado, que le llevó a declarar en enero de 2024 un "conflicto armado interno" en el convulso país golpeado por constantes ataques armados, asesinatos, extorsiones y secuestros.
Las acciones del mandatario, sin embargo, no pudieron contener la violencia criminal alimentada por el narcotráfico.
En ese contexto, Noboa, llega al balotaje en medio de un recrudecimiento de la violencia criminal que dejó 1.529 homicidios intencionales en enero y febrero de 2025, según el Ministerio del Interior.
Las estadísticas convierten al 2025 como el inicio de año más violento en la historia de Ecuador.
Noboa, que suele vestir juvenil e informal, se perfiló como un gobernante al que "no le tiembla el pulso" para combatir a las bandas criminales, lo que le sumó apoyos.
De ser reelecto, Noboa propone un nuevo plan de gobierno enfocado en ampliar los programas de asistencia social para reducir la pobreza, impulsar un desarrollo económico sostenible para generar empleo y la formulación de un plan anual de inversiones para infraestructura.
En seguridad, propone diseñar y aplicar políticas públicas de acuerdo al escenario actual de "riesgo y amenaza" y fortalecer las acciones para contrarrestar la delincuencia organizada y el narcotráfico, entre otras.
Noboa, heredero del magnate bananero y cinco veces candidato presidencial Álvaro Noboa, desarrolló una gestión turbulenta marcada por crisis económica, energética y de inseguridad, principales problemas del país.
Además, mantiene una pugna política y distanciamiento con la vicepresidenta, Verónica Abad, que se acentuó en el marco de la campaña electoral, al no optar por pedir licencia y encargarle el poder.
El joven presidente, que es padre de tres hijos, fue asambleísta (legislador) entre 2021 y 2023, cargo que ejerció con bajo perfil. Gracias a la fortuna de su familia, Noboa fundó a los 18 años su propia empresa y entre 2010 y 2018 trabajó en Corporación Noboa, de su padre, donde ocupó altos cargos.
Estudió en prestigiosas universidades de Estados Unidos donde obtuvo un título en Administración de Negocios y tres maestrías en Negocios, Administración Pública, y Comunicación Política y Gobernanza.