Mendoza, de de

Mundo Política

Luisa González busca hacer historia como la primera presidenta de Ecuador

La abogada de 47 años que estudió en España, asegura que unió a izquierdas y derechas. Consiguió el apoyo del movimiento indígena del país sudamericano.


Sabado, 12 de Abril de 2025

Luisa González, abogada y exasambleísta de 47 años, buscará convertirse este domingo en la primera presidenta electa en Ecuador en los comicios de la segunda vuelta, para recuperar el poder para la izquierda en el país sudamericano.

La aspirante, cobijada bajo la figura de su mentor, el expresidente progresista Rafael Correa (2007-2017), líder del Movimiento Revolución Ciudadana (RC), selló una primera vuelta ajustada el pasado 9 de febrero con su rival, el mandatario ecuatoriano y candidato a la reelección, Daniel Noboa.

Noboa, de centro-izquierda, obtuvo el 44,17 por ciento de los votos, superando por un estrecho margen (16.746 votos) a González, quien alcanzó el 44 por ciento.

De esta manera, el "correísmo", como se llama a la RC, consiguió el mejor resultado en una primera vuelta desde que Correa salió del poder y sobrepasó el techo de su "voto duro" o sólido que es del 33 por ciento.

De cara al balotaje, González, de personalidad carismática y temperamento fuerte, intentó potenciar su imagen y reorientar su estrategia en busca de votos con recorridos en provincias clave y encuentros con diferentes sectores descontentos con la gestión de Noboa.

  La candidata, quien perdió ante Noboa en las elecciones anticipadas de 2023, recibió el apoyo de una parte del movimiento indígena, sectores empresariales y partidos políticos de izquierda con miras al balotaje.

Un punto crucial fue el respaldo del Movimiento Pachakutik, brazo político de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), que firmó un acuerdo programático con la RC para respaldar a González.

Este acercamiento con los indígenas es clave, después de que su candidato en la primera vuelta, Leonidas Iza, obtuvo solo el 5,2 por ciento de los votos, que podría resultar decisivo en el balotaje.

Analistas prevén una elección reñida entre ambos políticos, ya que las últimas encuestas de intención de voto reflejan márgenes estrechos y sin un claro favorito.

De ganar, González se convertiría en la primera mujer en llegar a la Presidencia de Ecuador, en representación de las fuerzas progresistas, sociales y de izquierda.

Su eventual victoria significaría el regreso al poder de la Revolución Ciudadana, movimiento de tendencia progresista que es la principal fuerza política en un Ecuador políticamente atomizado.

González, quien es una devota cristiana, deportista y amante de los tatuajes, afirmó que en caso de ganar la Presidencia no desarrollará un gobierno a la sombra de Correa, pues quien dará la cara y tomará las decisiones será ella.

Correa está radicado en Bélgica después de que en 2020 la justicia ecuatoriana lo sentenció a ocho años de cárcel por delitos de corrupción en Ecuador, por lo que no puede regresar al país.

La candidata González, quien pertenece al círculo cercano del expresidente socialista, defendió el legado de Correa y sus políticas sociales en una década en el poder.

En sus actos de campaña, González, de sonrisa fácil, promete "revivir" Ecuador, un país agobiado por problemas económicos, falta de empleo, corrupción e inseguridad con altos niveles de criminalidad.

La candidata expresó su compromiso con las necesidades reales de la gente con una visión de país inclusiva y ofreció trabajar para garantizar un Ecuador donde la educación, la salud, el empleo y la seguridad sean derechos fundamentales y accesibles para todos.

"Esta patria, que tiene siete millones de personas en pobreza necesita un cambio", declaró la semana pasada González, en un festival urbano en el populoso sector Cristo del Consuelo, en la ciudad de Guayaquil (suroeste).

González prometió crear dos millones de empleos en cuatro años para capitalizar el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, y en materia de seguridad, tomar el control de los puertos, aeropuertos y fronteras, así como fortalecer a las Fuerzas Armadas y a la Policía con inteligencia y tecnología; capacitaciones y la entrega de equipamiento.

González, quien proyecta una imagen seria y tuvo un tono confrontativo con Noboa, reformuló su narrativa con el eslogan "Luisa por la vida", con el que busca conectar con el electorado en medio de la ola de inseguridad que golpea al país.

La candidata, divorciada y madre de dos hijos, nació en Quito el 22 de noviembre de 1977 y vivió la mayor parte de su vida en Canuto, un poblado campesino en el cantón Chone de la provincia costera de Manabí (oeste) de donde es originaria su familia.

La abogada, quien tiene gusto por la cocina y el baile, posee dos maestrías en Alta Gerencia por el Instituto de Altos Estudios Nacionales, y en Economía Internacional por la Universidad Complutense de Madrid, España.

Ocupó además varios cargos públicos durante el Gobierno de Correa y ganó una curul en la Asamblea Nacional (Congreso) para el periodo 2021-2025. Sin embargo, terminó su etapa como asambleísta el 17 de mayo de 2023 cuando el entonces presidente Guillermo Lasso disolvió la Asamblea Nacional (Parlamento) en medio de una crisis política.