Presidentes y cientos de delegaciones extranjeras viajaron a Roma para asistir a las exequias del papa Francisco.
El funeral del papa Francisco reunió este sábado a decenas de líderes internacionales. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump; el de Francia, Emmanuel Macron, y el de Ucrania, Volodimir Zelensky, se sentaron en primera línea, durante la ceremonia celebrada en la plaza de San Pedro.
La asignación de los asientos no es casual, sino que sigue un estricto protocolo que se establece por orden alfabético de los países en francés.
Trump, acompañado por la primera dama, Melania, se sentó en el comienzo de uno de los bancos de la primera fila y en el banco inmediato, separado por un pasillo, estaba el presidente de Finlandia, Alexander Stubb, y a su lado, Macron.
Sin embargo, la colocación de los bancos en la plaza vaticana hizo que Zelensky también estuviera en primera fila a pesar de que Ucrania ('Ukraine') está lejos de Estados Unidos ('Etats-Unis) en el alfabeto.
En primera fila también se encuentra Javier Milei, presidente de Argentina, junto a la delegación italiana encabezada por Sergio Mattarella y Giorgia Meloni, tal y como dispone el estricto protocolo que seguirá el funeral.
Además de Milei, entre los mandatarios latinoamericanos también está el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, el ecuatoriano Daniel Noboa, el dominicano Luis Abinader y la hondureña Xiomara Castro.
Los reyes Felipe VI y Letizia dieron el presente en el funeral del papa Francisco al igual que el príncipe Guillermo que representó a la Familia Real británica en el último adiós al sumo pontífice.
A pesar de que hay presencia de 155 delegaciones extranjeras, hay llamativas ausencias de jefes de Estado latinoamericanos, pues ni México, Colombia, Chile, Perú, Uruguay, Bolivia, Cuba o Venezuela estarán representados por su cabeza. Fuente: Infobae