Se contagió de coronavirus, pero al mismo tiempo tuvo un debut diabético. Su papá Walter contó cómo vivieron los 45 días de internación.
Agustina Tirapu es una niña mendocina de 7 años que, junto a su familia, tuvo un año por demás complicado. La pequeña hincha del Deportivo Maipú se contagió de coronavirus, pero al mismo tiempo tuvo un debut diabético, lo que fue derivando en otras patologías serias, como trombosis y hasta un ACV.
Fueron 45 días los que pasó internada en el Hospital Notti, 36 de ellos en terapia intensiva. Hoy se encuentra recuperándose en su casa con un panorama más que alentador. Walter Tirapu, su papá, contó en Aurora 91.3: “Arrancó con fiebre, dolor de garganta. El pediatra de ella no la pudo atender, fuimos al Hospital Universitario y nos dijeron que era anginas. La notamos debilitada, nos demoraron los análisis”.
“Como no mejoró la llevamos a un centro médico y la doctora apenas la vio dijo “esto es un debut diabético”. Nosotros asombrados porque no tenemos antecedentes diabéticos en la familia. Nos dijo que la llevemos al Notti, que ya nos estaban esperando. La conectaron, le hicieron análisis y era eso”, detalló en Buenos días, Aurora.
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“Apenas entró la hisoparon y le dio positivo por covid. Las dos cosas hicieron una explosión en su cuerpo. Gracias a la doctora llegamos a tiempo, la gente del Notti fue fantástico lo que hizo con Agustina y con cientos de niños todos los días. Realmente le salvaron la vida”, agregó.
Después de 36 días en terapia intensiva, Agustina despertó: “Aún estaba con respirador, ahí le dio una trombosis y un ACV. Son todas cosas que fue superando en esos días”, recordó su papá.
“No hay ningún caso registrado de un caso tan grave de covid y debut diabético y shock séptico, no hay antecedentes. Hacían interconsultas con hospitales del exterior”, remarcó.
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“Cuando la pasaron a sala común fue muy lindo, las enfermeras salieron al pasillo a saludarla. Y el día del alta también, fue muy esperado. La gente del Notti se portó de una manera maravillosa”, se emocionó Walter.
“Los últimos días ya quería irse, extrañaba mucho a su hermano, su casa. Ella ahora tiene que hacer rehabilitación por la parte motriz, recuperar el movimiento de las piernas, es muy voluntariosa. Los médicos creen que no van a quedar secuelas, es todo recuperable. Va a poder hacer una vida normal”, expresó Walter sobre Agustina, la pequeña guerrera.
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