Con el primer caso positivo en la provincia, y transmisión comunitaria en Buenos Aires, Mendoza se prepara para una detección más rápida de los casos de variante Delta, principalmente en los viajeros que ingresan desde el exterior. 

La idea planteada desde el sector epidemiológico de la provincia es realizar los estudios de detección en la provincia, para no esperar los 10 días que demoran en llegar los resultados desde el Instituto Malbrán, desde Buenos Aires. 

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Para eso, Mendoza tiene la tecnología, el personal y los recursos necesarios, pero falta aún un proceso que requiere de información de determinados recibos. En simples palabras, formalizar la importación de los elementos necesarios. 

“Las posibilidades las tenemos, lo que pasa es que son cosas complejas para llevarlas a cabo, por lo que estamos trabajando para tratar finalmente tener un propio modo de localización y de esta manera resolver localmente la detección y el monitoreo", indicó Carlos Espul, jefe del laboratorio de Salud Pública, en Aurora 91.3. 

Las ventajas son muchas y es que los resultados se obtendrían de manera inmediata, para después hacer los estudios de secuenciación para ver la parte evolutiva del virus. Por otro lado se podrá actuar con rapidez y tomar las medidas necesarias para que no se siga propagando, según explica el especialista. 

Además pidió conciencia para que no pase lo que sucedió en Córdoba y mencionó: “Es muy importante que la persona sepa y entienda como debe proceder, ya que tenemos que tener en cuenta todos los conocimientos adquiridos el año pasado."

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En Mendoza se detectó hace unos días el primer caso de la variante Delta. Se trata de una mujer que llegó con su familia desde España. Hasta el momento es el único caso positivo, ya que el resto de su familia dio negativo en el PCR. 

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