Desde que empezó el 2022, el aumento de casos de Covid no ha cesado. Mendoza ha llegado a números récords en comparación a todo el proceso de pandemia, por lo que se ha visto perjudicado el servicio de salud, que no solamente comenzó a tener más ingresos en internaciones, sino que tiene escaso personal debido a que hay un gran número de profesionales contagiados. 

 En las clínicas y hospitales privados la situación es más complicada, ya que tienen un 96% de ocupación de camas de terapia. "Hay una saturación del sistema con una alta ocupación de camas tanto en terapia como en sala común. Hay un aumento considerable de los casos Covid-19, se están internando pacientes en ambos sectores con patologías primarias", aseguró Rodolfo Torres, de ACLISA, en declaraciones periodísticas. 

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En tanto, afirmó que en las clínicas y sanatorios provinciales, el 40% de la planta de enfermeros está contagiada o aislada y 30% de los médicos están en la misma situación. Es por eso que algunos servicios de salud privados han suspendido licencias para poder mantenerse operativos "porque no alcanza el personal", informó. 

Otra de las medidas que se están tomando desde el sector se refiere a reprogramar cirugías, ya que son los que presentan un mayor estrés operativo. Por otra parte, desde ACLISA mencionan que "el 80% de los internados o no está vacunado o tiene el esquema incompleto. Hay muchos que les falta el refuerzo, solo el 10% de los internados lo tiene", por lo que advierte una media de internación de 10 días debido al avance de Ómicron. 

"Es fundamental el uso del barbijo y de buena calidad, ya que está demostrado que los barbijos de tela no son efectivos para la variante Ómicron. Hay que vacunarse y usar correctamente el barbijo. Pero, además, hay que tener paciencia, hay mucho maltrato al personal, no hay que perder de vista que quien está ahí da la vida por los pacientes", aseguró. 

El panorama fue cambiando en solo unos días,  ya que el comienzo de año mostró un importante incremento de casos, que en su mayoría eran cuadros leves, por lo que había baja ocupación de camas de internación y escasa letalidad. Sin embargo, en los últimos días el sistema de salud está comenzando a estresarse por la alta demanda de internación de cuadros más graves de Covid-19.