Ruca, la perra ovejero alemán que era una parte clave de las investigaciones de crímenes, murió este miércoles a los 13 años, según lo informó la Escuela de Adistramiento Canino (ESCAM).

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La perra que realizó 10 años de servicio fue clave en investigaciones como la del caso de la detención de Gil Pereg en 2019, ella fue fundamental para encontrar los cadáveres de la madre y de la tía del asesino en Guaymallén.

Otro de sus casos fue en el femicidio de Concepción Arregui, la ciudadana chilena que fue asesinada por su pareja en el dique Potrerillos en  2018. En 2017, participó en la investigación de otro femicidio, encontró el arma homicida de Marina Vedia.

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En 2021, Ruca dejó el servicio y quedó al cuidado de su guía, Ayelén Castro quien la despidió a través de las redes sociales:"Tu paso por esta vida marco el corazón de cada ser que te conoció, tuve el privilegio de ser tu guía y de crecer al lado tuyo en esta apasionante actividad. Fuiste esencial en muchos casos para darle paz a las familias, fuiste la perra prodigio con que todo guia sueña, la mejor compañera canina en la casa, dejaste muy alta la vara, pero más que nada dejaste marcada mi alma".