Después de varios días de reclamos por las largas horas de espera en el paso internacional Los Libertadores, la situación parece haber llegado a un estado óptimo, ya que desde el lado argentino, en el paso Cristo Redentor, afirman que no hay colas para cruzar la cordillera. 

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Este hecho se debe a que las autoridades chilenas duplicaran las cabinas de atención. De esta manera, la demora para quienes ingresan al país trasandino se acortó de siete a cuatro horas, luego de cinco días en que el tránsito fue caótico por las horas de espera.

Durante ese periodo solo funcionaban 4 garitas de 18, según los turistas que intentaron cruzar y las autoridades nacionales se tiraban la culpa entre sí. Este miércoles comenzaron a funcionar 8 y eso mejoró notablemente el tiempo de espera.

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Sin embargo, el paso podría cerrar en caso de que las condiciones climáticas no acompañen, ya que han pronosticado intensas lluvias en Alta Montaña.