El homicida pensó que la víctima era el amante de su ex novia y decidió matarlo mientras cocinaba un asado.
Víctor Hugo "Mono" Sánchez tenía pedido de captura internacional luego de dispararle a Sergio Morales en una confusión. Tras el asesinato, el homicida escapó y no pudo ser encontrado, pero hoy se entregó voluntariamente a la Justicia.
El insólito hecho ocurrió a mediados del mes de abril en una vivienda ubicada en la calle Julio Leónidas Aguirre al 1500 de Guaymallén. Mientras la víctima, conocido como "Keko", cocinaba un asado a la parrilla para su novia y su amiga, otro hombre le disparó desde el techo de la casa al pensar que era el amante de su expareja.
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En medio de la lluvia de balas proveniente del arma del Mono, uno de los proyectiles impactó en el asador. Con una grave herida de disparo en el cuello, Morales intentó recuperarse en la terapia intensiva del Hospital Central pero, tras varios días de agonía, murió.
En paralelo a esto, el agresor se dio a la fuga y nunca fue encontrado por la policía que lo buscaba hasta con pedido de captura internacional con la Interpol. La historia cambió el día de hoy cuando Victor Sánchez se entregó a las autoridades.
En las próximas horas, el homicida será imputado por el delito de "homicidio agravado por el uso de arma" o por "femicidio transversal". Además, otra causa que se le podría sumar es la de amenazas agravadas.