Los colectivos deben ir de a uno por Roque Carranza. Los que estén en espera tienen que resguardarse en Pampa de Leña hasta que Gendarmería los autorice.
La semana pasada fue un caos la Aduana Argentina en el Paso Cristo Redentor. Piñas de personas que iban en tours de compras a Gendarmería, insultos y hasta una mujer con un ataque de epilepsia fue el balance de una jornada complicada para quienes querían viajar a Chile. Para aliviar la situación, las autoridades del cruce al país trasandino determinaron un nuevo protocolo para estos colectivos.
La nueva forma es: ingresa un micro por el control ubicado en Roque Carranza, los funcionarios requisan y decomisan la mercadería en caso de que sea necesario, y los micros de atrás deben esperar a 3 kilómetros, en la zona conocida como Pampa de Leña.
"Estas medidas se hacen en función de resguardo de funcionarios y el normal desenvolvimiento de los trámites correspondientes, teniendo en cuenta que en el caso de pasar la franquicia de 300 dólares por persona, deberán abonar lo que corresponde si se han excedido", explicaron desde la Aduana.
Las autoridades del Paso Cristo Redentor piden responsabilidad a los tours de compras
Según ha trascendido, los tours de compras son una máscara, aunque siempre hay excepciones, para actividades ilegales, como por ejemplo traer mercadería desde Chile para revender en Argentina. Muchas "empresas" venden asientos para que particulares compren mercadería para uso personal, pero en realidad, van cargados de personas que pasan bienes para otros.
Es ilegal de acuerdo a lo informado por la propia Aduana, que sólo deja pasar bienes que sean para uso personal y no destinados al comercio. "La norma es clara pero mucha gente intenta pasar por la frontera cantidades exageradas de zapatillas o electrodomésticos", explicó un aduanero.
Hace unos días, incluso cuando los efectivos decomisaban un cargamento de estos tours de compras, los coordinadores y pasajeros comenzaron a golpear a los gendarmes que intentaban hacer cumplir la ley.
Es por ello que ahora las autoridades llamaron a estas "empresas" a tener responsabilidad sobre a quién suben a los vehículos: "Se ha elevado nota a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte para que notifiquen a las empresas de este tipo de transporte, para que choferes, auxiliares y coordinadores sean responsables por la gente que traen en los ómnibus".
"Gendarmeria Nacional ha reforzado la seguridad y también efectúa patrullaje para evitar descontrol en el centro de frontera. Se pidió, además, la colaboración de Aduana para la dotación de personal durante las 24 horas", indica un comunicado.