Este miércoles se ratificó un acuerdo entre el ministerio de Seguridad y el Instituto, en el cual se busca fomentar la reinserción social de los internos una vez cumplan sus condenas.
El Gobierno Provincial ratificó este miércoles un convenio entre el ministerio de Seguridad y el Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza (Iscamen), con el cual el organismo, que tiene como presidente al radical José Orts, recibirá indumentaria realizada íntegramente por parte de presos de cárceles mendocinas.
El acuerdo fue en junio del año pasado, pero recién esta semana fue oficializado en el Boletín Oficial, bajo el decreto 2896. Allí se concretó la búsqueda de acciones con el objetivo de seguir generando trabajo para las personas privadas de la libertad, con el objetivo de lograr la reinserción social una vez cumplan sus condenas.
En este caso, el Gobierno difundió que a comienzos de diciembre los internos confeccionaron indumentaria (chombas, camisas, pantalones, ambos y polares) que fue adquirida por el Iscamen. La misma fue elaborada en los talleres de empresas privadas que funcionan dentro de los complejos y unidades penales.
La provisión consistió en 700 chombas, 420 camisas de trabajo, 430 pantalones cargo, 315 ambos y 420 polares, diseñados para las tareas de campo que realiza el personal de la Bioplanta Santa Rosa. La partida fue confeccionada con materiales sustentables, en línea con el compromiso del Iscamen con el cuidado del medio ambiente.
En las próximas semanas se espera la entrega de la segunda tanda de indumentaria que incluye remeras y gorras. Las acciones reflejan una política implementada desde la primera gestión del gobernador Alfredo Cornejo, que se ha visto fortalecida tras el aporte de Iscamen, un organismo público independiente.
Además de promover la sostenibilidad, el programa busca reducir el tiempo ocioso en los contextos de encierro y preparar a los internos para su futura reinserción social y laboral.
En los considerandos del convenio, desde la cartera que dirige Mercedes Rus indicaron que la reinserción laboral de las personas privadas de la libertad "es fundamental y resulta una contribución central para disminuir los índices de reiterancia y reincidencia de esta población".
Marcaron que en materia de penas privativas de la libertad en todas sus modalidades, "tiene por finalidad lograr que el condenado adquiera la capacidad de comprender y respetar la ley, procurando su adecuada reinserción social, en los talleres instalados en los establecimientos penitenciarios se enseña y desarrollan oficios a fin de capacitar y brindar herramientas para su futura reinserción social; asimismo se coordina todo lo inherente a la planificación de la producción y la comercialización de productos elaborados en los Complejos y Centros de Alojamiento penitenciarios".
A través de estas acciones, tienen como objetivo también "promover beneficios para la sociedad, con miras al crecimiento continuo, al desarrollo de negocios sustentables e innovación constante".
De hecho, el trabajo está fiscalizado por la Unidad de Producción Penitenciaria, que debe "supervisar la percepción de fondos provenientes de la venta de artículos; elaborar propuestas de planes de producción, previo estudio de la capacidad de elaboración, factibilidad de comercialización de los artículos en el mercado y posibilidades económicas".
Para Rus, este convenio es "crucial", ya que "no solo permite al Iscamen adquirir sus uniformes a un costo reducido, sino que fortalece un plan integral para el desarrollo de capacidades entre las personas privadas de libertad. Estamos comprometidos en proporcionarles un entorno donde puedan adquirir nuevas habilidades, facilitando así su futura reinserción laboral".
Además, la ministra resaltó el compromiso con la sostenibilidad ambiental, mencionando que los uniformes serán elaborados con materiales 100% sustentables, lo que añade un valor en términos ambientales.
Orts agregó que el personal del Iscamen "contará con ropa apropiada, incluyendo prendas agroecológicas que reflejan nuestra dedicación al agro mediante técnicas como el insecto estéril, fortaleciendo así nuestra línea de trabajo en armonía con el medioambiente".
"Esta iniciativa no solo beneficia a nuestros empleados. También contribuye a preparar a las personas privadas de libertad con habilidades y valores culturales y sociales que faciliten su reintegración a la sociedad", marcó el titular del Iscamen.
Alejandra Llarena, subdirectora del Servicio Penitenciario, sostuvo que "el Servicio Penitenciario de Mendoza ha ido creciendo significativamente en cantidad de personas trabajadoras. Lo que buscamos ahora, con la firma de estos convenios, es dar un salto de calidad en los productos que ofrecemos. Por eso es fundamental que entidades públicas y otras organizaciones puedan sumarse a esta iniciativa, que busca que las personas privadas de libertad tengan además una formación laboral que les permita promover su reinserción social".