Ya hubo operativos en Las Heras y Luján de Cuyo. El objetivo principal es identificar y relevar aquellos loteos clandestinos o no autorizados que se han establecido en zonas con riesgo aluvional.
En una acción conjunta crucial para la seguridad y el ordenamiento territorial, la Dirección de Planificación, dependiente de la Subsecretaría de Infraestructura y Desarrollo Territorial, llevó a cabo una inspección en la zona del Piedemonte en Las Heras y Luján de Cuyo.
De esta iniciativa también participaron activamente el Ministerio de Energía y Ambiente, la Dirección de Hidráulica y ambos municipios. El objetivo principal de este operativo fue identificar y relevar aquellos loteos clandestinos o no autorizados que se han establecido en zonas con riesgo aluvional. La presencia de asentamientos en el área del Pedemonte representa un grave peligro para la vida de las personas, exponiéndolas directamente a eventos naturales como aludes o crecidas.
"En el marco de la implementación de la Ley 9414, que busca regular las
actividades en la zona del Piedemonte para su conservación y su función
ambiental, estamos efectuando estos controles interjurisdiccionales. En esta
unidad participan miembros de la Dirección de Planificación, de Hidráulica, de los municipios de Luján, Las Heras y también se extenderá a Godoy Cruz y Ciudad", explicó Matías Dalla Torre, director de Planificación.
En el mismo sentido, el funcionario resaltó que se está trabajando en forma
coordinada para lograr un desarrollo sustentable en el Piedemonte. "Estamos yendo a la zona para detectar violaciones a la normativa. Porque la ley es muy específica y establece sanciones para aquellos que dañan el ambiente, se asienten o compren lotes que no están regularizados o estén en forma clandestina. A partir de estas inspecciones, iniciamos un procedimiento de sanción para remediar los daños ocasionados en esta zona de fragilidad", agregó.
Más allá del riesgo inminente para los habitantes, la proliferación de estos
loteos irregulares contribuye a un crecimiento poblacional desorganizado y
dificulta enormemente un eficiente ordenamiento territorial en el departamento.
Estas inspecciones son fundamentales para detectar y abordar estas
problemáticas, buscando proteger a la ciudadanía y promover un desarrollo urbano planificado y seguro.
Además, un crecimiento urbano que no fue planificado genera una expansión desordenada y áreas aisladas con escasos servicios y equipamientos. También agudiza la desigualdad, creando espacios de mayor exclusión y pobreza.
En el mismo sentido, la expansión urbana afecta los ecosistemas y produce un enorme impacto ambiental porque reduce la capacidad de amortiguación frente a inundaciones y aumenta el riesgo de erosión.
"Sabemos que Mendoza se está expandiendo demográficamente, pero debe
hacerlo de manera adecuada y ordenada. La ciudad crece y eso es lo que
estamos tratando de controlar para hacer un ordenamiento territorial acorde a nuestra normativa", concluyó Dalla Torre.