La ministra de Seguridad y Justicia, Mercedes Rus, brindó detalles sobre el operativo previsto ante las marchas anunciadas para los próximos días en Ciudad. Lo hizo acompañada por el director general de Policías, Marcelo Calipo, y autoridades de la Municipalidad.

"En Mendoza el orden no se negocia y las leyes se cumplen. Los mendocinos pueden estar tranquilos: no vamos a permitir hechos de violencia como los registrados recientemente en manifestaciones", sostuvo Rus.

Detalló que en las últimas movilizaciones antimineras se produjeron agresiones a autoridades -entre ellas, la ministra de Energía y Minería y legisladores-, lesiones a policías, daños a bienes públicos y privados y múltiples pintadas en el microcentro, además de ataques contra móviles policiales. La funcionaria recordó que en marchas como las del 29 de agosto, 2 de octubre y la pasada del 2 de diciembre, "no hubo acatamiento" a normas básicas como el despeje de media calzada, el cuidado del patrimonio público y la no agresión a terceros.

La ministra destacó que Mendoza cuenta con amplia experiencia en marchas multitudinarias y pacíficas. En varias de ellas participaron más de 40.000 personas respetando la media calzada, sin daños ni agresiones. Del mismo modo, expresó que las convocatorias del 8 de marzo, 25 de noviembre y diversas marchas sociales se realizan habitualmente en condiciones de normalidad, gracias al trabajo previo con referentes y organizaciones.

"Así funcionan las instituciones democráticas: la ciudadanía se expresa y la Policía protege su derecho a hacerlo. Lamentamos que en algunos casos ese equilibrio se haya roto", señaló.

"Nuestro objetivo es garantizar el derecho a manifestarse, pero con respeto al resto de la ciudadanía. No vamos a tolerar ataques al patrimonio público ni acciones que vulneren la tranquilidad y el orden que caracterizan a Mendoza. Esperamos responsabilidad de todos", completó Mercedes Rus.

En ese sentido, explicó que, a partir de estos antecedentes, se definió un abordaje conjunto para las convocatorias vinculadas a la actividad legislativa del martes 9. El Gobierno provincial y la Municipalidad acordaron disponer la plaza Independencia como espacio de concentración y el sector habilitado frente a la Legislatura como punto histórico para expresarse. "Son lugares aptos para manifestaciones pacíficas, sin acampes, sin daños y sin interferencias al normal funcionamiento de la ciudad", señaló.

"Quienes quieran expresar su acuerdo o desacuerdo podrán hacerlo en convivencia, sin violentos y sin afectar la vida del resto de los ciudadanos. Ese es el equilibrio democrático que debemos recuperar", afirmó. Asimismo, ratificó que la Provincia mantiene diálogo permanente con organizaciones sociales, aunque en este caso no fue posible establecerlo. "Las puertas siguen abiertas", remarcó.