El ámbito artístico y cultural de Mendoza se conmocionó este martes por el fallecimiento de Norberto Filippo, a los 68 años. El artista plástico, reconocido por sus acciones excéntricas y audaces, había sido internado días atrás por una neumonía, pero lamentablemente no logró recuperarse. Antes de ser hospitalizado, Filippo se encontraba produciendo una obra en Buenos Aires.

De pintar a presidentes con Malbec a director de Zoológico

La trayectoria de Filippo en Mendoza estuvo marcada por la creatividad y la polémica. Él mismo fue descrito por la prensa local como un artista "multifacético que se anima y está dispuesto a todo", lo que lo llevó a usar vino Malbec para componer sus cuadros. Con esa técnica, pintó un retrato de Néstor Kirchner que conmovió a Cristina Kirchner. También pintó a otros presidentes que participaron en una cumbre del Mercosur en nuestra provincia.

Esa audacia lo llevó a aceptar, en 2013, el cargo de director del Zoológico de Mendoza durante el gobierno de Francisco Pérez, aunque su gestión duró apenas seis meses. Una de sus decisiones más recordadas y comentadas fue la de retirar el equipo de aire acondicionado de la oficina de la dirección para instalarlo en la jaula del recordado oso polar Arturo, en un intento por mejorar las condiciones de encierro que soportaba el animal.

Sus excentricidades artísticas precedieron su incursión en la gestión pública. Años antes, Filippo había cobrado notoriedad cuando arrojó su propio automóvil desde una grúa de 30 metros de altura sobre un cubo de cemento, con el fin de estudiar la resistencia del contenedor diseñado para albergar pilas y baterías viejas. En otra ocasión, realizó una escultura rellena de pilas y baterías, colocándole la imagen de Mafalda.

Filippo también se desempeñó como asesor de Gabinete en el área de Cultura de Mendoza, dos años después de su breve paso por la dirección del Zoológico. Su obra y sus acciones dejan una huella imborrable y controversial en el arte mendocino.