Tanto la Franja de Gaza como la ciudad sureña de Khan Younis fueron testigos, una vez más, de las llamaradas provocadas por los cohetes disparados desde Jerusalén en la madrugada de este 16 de junio.

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Apenas un mes después de una tregua acordada entre Israel y Hamas, tras aquellos 11 días de violencia, explosiones y bombas que resultaron en 232 muertos en Gaza y 12 en Israel, los proyectiles volvieron a cruzar el cielo. Esto, a pocos días de la asunción del nuevo gobierno israelí, a cuya cabeza se ubica Naftali Bennet.

Naftalí Bennet, el nuevo primer ministro de Israel.

Bennet, del sector ultraderechista, vino a reemplazar a Benjamin Netanyahu, después de 12 años de presidencia.

La ruptura del precario acuerdo de paz se produjo como corolario de una marcha de judíos ultranacionalistas portando banderas de Israel en Ciudad Vieja, Jerusalén Este, para llegar al Muro de los Lamentos, que es el máximo lugar de culto del judaísmo, en celebración del evento anual.

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Inicialmente, la marcha había sido programada para el 10 de mayo, y la alerta de bombardeos de Hamas la interrumpió.

Este episodio anteriormente había hecho detonar la confrontación entre ambos bandos: Hamas disparó cohetes de largo alcance contra Jerusalén para interrumpir la marcha y se desencadenó el conflicto.