En Casa Blanca y todo Estados Unidos, los corazones se detuvieron por un momento al ver que Rusia bombardeó Lviv, la ciudad ucraniana que limita con Polonia, justamente en la zona donde el presidente norteamericano, Joe Biden, se encuentra. 

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El presidente se encuentra en una ciudad limítrofe a Ucrania visitando centros de refugiados. Sin embargo, desde la localidad ucraniana de Lviv se escucharon tres fuertes explosiones que asustaron a más de uno. 

Tras esto, Biden calificó a su par ruso Vladimir Putin de “carnicero” y emitió dudas sobre el supuesto cambió de estrategia de Rusia, que afirmó centrar sus ofensivas sobre el este de Ucrania.

El mandatario estadounidense reafirmó el sábado en Polonia que el artículo 5º del tratado de la OTAN - que estipula que el ataque contra un país miembro de la alianza es un ataque contra todo el pacto- constituye un "compromiso sagrado" para Estados Unidos.

Por su parte, el presidente de Polonia, Andrzej Duda, dijo a Biden durante una reunión en Varsovia que en el país tienen una "sensación enorme de estar amenazados"; un miedo a que Rusia pueda atacar su territorio después de haber invadido Ucrania.