Omar De Marchi, Diputado Nacional de Juntos Por el Cambio, habló sobre la marcha de este lunes y expresó: "A esta altura es evidente que lo que quieren es un rebaño obediente".
Omar De Marchi, Diputado Nacional de Juntos Por el Cambio, habló este martes en Aurora 91.3 respecto de la marcha 17A: “Lo de ayer fue muy importante, porque aún en el marco de una cuarentena interminable, con una publicidad que tiene más olor a manipulación por parte del Gobierno Nacional que a publicidad sanitaria, hubo manifestaciones en todo el país, por lo tanto el Gobierno tiene que escuchar. No hay peor sordo que el que no quiere oír. Pasar por encima de un reclamo auténtico de un importante sector de la sociedad es estar sordo, y con sordera no se conduce bien a los países”, expresó.
“Todo sirve y todo suma, lo que me parece que queda al descubierto es que el Gobierno nacional, mientras te obliga a encerrarte, avanza con proyectos que tienden a mejorar la situación judicial de la vicepresidenta de la Nación y de muchos de sus ex funcionarios. Se advierte el "gato encerrado" y por eso ha salido la inmensa mayoría de la gente a reclamar”, fueron las palabras del funcionario.
Y agregó: “Todos coinciden, aún sin conocer en profundidad el proyecto, advierten que hay una intención oculta por parte del Gobierno. A esta altura es evidente que lo que quiere es un rebaño obediente: está silenciado el parlamento, amordazada la Justicia, tiene arrodillados a todos los Gobernadores, le pagan el IFE a millones de argentinos, el ATP a las empresas. La mayoría ha ido dependiendo de la mano bondadosa del presidente; sos amigo te doy, no sos amigo te quito”.
“Pero no cuentan con que la gente en el fondo tiene un espíritu de libertad espontáneo y se va a negar a vivir como rebaño”, sentenció.
Además, De Marchi expresó: “No hay que exagerar cuando uno dice que está en juego la República. Los países que de a poco han perdido libertades, han empezado así. Los procesos de intervención cultural arrancan de esta manera. Todos los mensajes del Gobierno son totalmente contradictorios, para terminar de romper con la actividad privada, para que el Estado se termine de apropiar de los medios de producción. Por ahí exagero, pero prefiero exagerar antes de encontrarme un día con que hemos perdido un país”.
Respecto de la cuarentena, analizó: “Ha habido una impericia absoluta. Diez días antes de que arrancara la cuarentena decían que era un virus insignificante y quince días después estaban encerrándonos a todos. Mientras te tienen encerrados avanzan con reformas que les convienen”, al tiempo que disparó: “Somos el país número quince en cantidad de infectados a nivel mundial, tan exitosos no hemos sido, más bien hemos sido un desastre”.
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