Lionel Messi quedó en libertad de acción. Su vínculo contractual con el Barcelona terminó en la medianoche del 30 de junio y por primera vez desde su llegada al club catalán, el rosarino se quedó sin un vínculo vigente.

Las negociaciones entraron en un impasse por la participación del astro en la Copa América con la Selección Argentina. 

El rosarino había pedido la desvinculación el año anterior pero lo hizo fuera de término y debió continuar en la entidad española. El burofax enviado por Messi para irse de Barcelona el año pasado fue el momento de máxima tensión con la dirigencia que en aquel entonces comandaba Josep María Bartomeu. El jugador finalmente no quiso hacerle juicio a la institución y decidió quedarse hasta el final de su contrato.

Pero el panorama actual es diferente por la llegada de Joan Laporta a la presidencia. El mandatario compartió el exitoso período en el que gobernó durante 2003 y 2010.

Según el diario catalán Sport, a pesar de la buena relación con Laporta, la continuidad no está asegurada. El jugador pretende con su continuidad un proyecto deportivo ambicioso, con el protagonismo que había logrado sostener durante varios años.

La prensa española es optimista, aunque por el momento no hay certezas sobre el cierre de esta novela y el presidente se ha mostrado confiado al ser consultado.

La presencia de Messi en el acto de asunción de Laporta y el abrazo entre ambos habían sido tomados como claros gestos de un objetivo en común. 

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“Sus botas seguirán en el césped del Camp Nou”, declaró hace un tiempo a La Vanguardia. En tanto, completó: “Se quiere quedar. No contemplo un no, pero no es fácil. Hacemos lo que podemos. No hace falta seducirlo, está decidido a permanecer si se dan una serie de circunstancias".

Según TyC Sports, el club atraviesa una de las peores crisis económicas de su historia y Laporta ya avisó que el vínculo deberá ajustarse a la realidad de la institución. La propuesta económica que trascendió en medios españoles contiene una significativa reducción en el salario en relación al último firmado.

La contratación de Sergio Agüero siempre se tomó como un guiño hacia Lio aunque su ausencia en la presentación de la nueva camiseta del equipo para la próxima temporada causó sorpresa y generó cierto temor entre los hinchas. Sin embargo, la puesta a la venta de la número 10 con el nombre del rosarino calmó a los simpatizantes y los ilusionó con la continuidad.

Además, de Agüero, llegaron al blaugrana Eric García (libres de Manchester City), Emerson Royal (ejecutó la opción de recompra de Betis) y Memphis Depay (libre de Lyon).

Varios medios españoles revelaron que la dirigencia también piensa seducir a Messi con promesas luego de su retiro: ser embajador del club, diferentes homenajes y hasta una estatua en el estadio.

Manchester City y PSG manifestaron su intención de contratar al astro argentino cuando quiso dejar el club catalán. Luego los rumores cesaron pero ahora podrían volver a la carga para seducir al jugador aunque la falta de versiones periodísticas quizás denoten que las negociaciones con el Barca están encaminadas.

Seguramente, el misterio se develará una vez que Argentina finalice su participación en la Copa América.