* Por Daniela Conil

El peronismo local nuevamente tuvo un duro golpe electivo -quizás el peor de todos- al quedar en tercer lugar en las elecciones PASO 2023, el peor resultado del Partido Justicialista en Mendoza desde la vuelta de la democracia. 

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Según los resultados oficiales, el frente Cambia Mendoza se consagró en estas elecciones y obtuvo el 42.67% de los votos con una victoria de Alfredo Cornejo y votos claves de Luis Petri para posicionar al frente como el ganador. 

En segundo lugar, donde se esperaría que esté el PJ, se ubicó una joven Unión Mendocina, un frente que lleva existiendo apenas 45 días, según afirmó el propio impulsor de este espacio, Omar De Marchi, con un 20.29% de los votos. 

El peronismo, ni siquiera sumando los resultados de los cuatro candidatos que compitieron en la interna, logró acercarse al segundo lugar y tuvo que conformarse con un 15.68%, de los votos, marcando así la peor elección histórica para este frente. 

Este resultado profundizó una herida que ya tenían desde las Elecciones Legislativas del 2021, cuando solamente consiguieron un poco más de 25 puntos por sobre un aplastante 49,89% de votos del oficialismo, pero en aquella ocasión lograron retener el escoltado en la provincia. 

Lo cierto es que el peronismo viene con derrotas tras derrotas desde el año 2013, cuando perdió las Elecciones Legislativas siendo oficialismo provincial, con un 27%, contra un 47% que obtuvo el radicalismo. 

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Luego de ese antecedente, llegó la derrota en las elecciones Ejecutivas del año 2015, donde Alfredo Cornejo se impuso en las generales con el 48,38% frente al 41.02% que consiguió el oficialismo con Adolfo Bermejo. 

Si bien podría decirse que en las pasadas elecciones desdobladas de los departamentos gobernados por el peronismo ganó justamente este frente, pero la realidad es que no consiguen una victoria electiva desde hace 12 años, específicamente desde que Francisco "Paco" Pérez logró un 42,76% para suceder a otro justicialista: Celso Jaque. 

Sin embargo, los resultados comenzaron a decaer poco a poco y llevaron al justicialismo a un panorama que, quizás, jamás se hubieran imaginado: quedar relegados como la tercera fuerza, superados no solo por el radicalismo (histórico opositor en todos los aspectos que se puedan pensar) sino también por un nuevo frente que nació hace menos de dos meses. 

Desde ahora hasta septiembre, toca hacer una mirada introspectiva para entender aquellos mensajes profundos que dejan los números electorales, y que cada vez van más en contra de "los muchachos peronistas".