El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) activó un protocolo de prevención tras confirmarse la detección de la Peste Porcina Africana (PPA) en jabalíes silvestres de la región de Barcelona.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) informó la suspensión temporal de las importaciones de mercancías de riesgo provenientes de España. La medida, de carácter preventivo, se tomó a raíz de la detección de la Peste Porcina Africana (PPA) en jabalíes de Barcelona. El organismo sanitario argentino advirtió que la restricción se aplica sobre todo a aquellos productos capaces de vehiculizar el virus, el cual afecta gravemente a los cerdos domésticos y silvestres, y provoca una alta tasa de mortalidad.
La Peste Porcina Africana es una enfermedad de contacto que se transmite entre cerdos, tanto domésticos como silvestres, de forma directa o indirecta. El riesgo radica en la capacidad del virus de permanecer viable durante un tiempo considerable tanto en el ambiente como en diversos productos porcinos.
Es importante destacar que, tal como aclaró Senasa, la PPA no es una enfermedad zoonótica, por lo que no representa ningún riesgo para la salud de las personas ni altera la inocuidad o calidad de los productos de origen porcino para el consumo humano.
Sin embargo, el riesgo de ingreso al país existe por vía indirecta. Por ello, el organismo recordó que quienes hayan estado en contacto con animales en países donde circula el virus no deben ingresar a establecimientos productivos en Argentina, ya que la ropa, el calzado u otros objetos pueden actuar como transportadores del patógeno.
A partir de la confirmación del hallazgo por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de España y su comunicación oficial a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), el Senasa reforzó inmediatamente las medidas de prevención sanitaria en todos los puntos de entrada al territorio nacional.
Para prevenir el ingreso de mercancías, productos y subproductos de origen porcino, se intensificaron los controles de cargas comerciales en puertos, aeropuertos y puestos fronterizos de todo el país. El objetivo es mantener el estatus sanitario argentino libre de PPA.