A este panorama se suma la reestructuración de subsidios que impactará fuertemente en las boletas.
A pocos días del inicio oficial del verano, el aumento de las temperaturas vuelve a poner en el centro de la escena la preocupación por el consumo eléctrico y el impacto que tendrá en las facturas del servicio. La última temporada estival ya fue un desafío para el sistema eléctrico y, según lo anticipado por la Secretaría de Energía, la exigencia de la red será aún mayor este año, con picos de demanda que podrían llegar a los 30.700 megawatts.
Desde la Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas (CADIEEL) advirtieron sobre la sobreexigencia que se espera en la red. Además, alertaron sobre el efecto que este incremento de uso tendrá en los bolsillos, ya golpeados por la suba de costos generalizada y la inminente reducción de ayuda estatal.
A la alta demanda se suma la reforma del mercado eléctrico impulsada por el Gobierno, que oficializó cambios en la segmentación de tarifas. La reestructuración del sistema de subsidios planea avanzar a partir del 1 de enero de 2026, con el objetivo de que una porción de los usuarios deje de recibir el beneficio de manera progresiva.
Aunque el proyecto oficial contempla una bonificación especial del 25% para la electricidad y el gas, esta se irá reduciendo hasta su eliminación total en diciembre del año próximo. En consecuencia, especialistas del sector indican que los incrementos en las boletas de ambos servicios podrían alcanzar hasta un 75% para los usuarios sin subsidios.
Frente a este complejo panorama de alta demanda y costos crecientes, la adopción de hábitos de consumo eficientes se vuelve crucial para los hogares mendocinos. Es una herramienta clave tanto para prevenir sobrecargas en la red como para amortiguar el impacto económico. En ese marco, CADIEEL difundió una serie de recomendaciones esenciales para optimizar el uso de la electricidad.
Entre las diez claves para el ahorro se destacan consejos como situar el termostato del aire acondicionado a una temperatura de 24º C en verano (cada grado extra representa un 8% más de consumo) y elegir siempre luces LED, que consumen un 45% menos que las de bajo consumo. También es vital apagar los dispositivos en "stand by" y elegir electrodomésticos de Clase A por su eficiencia.