El hombre acudió a la marcha que se desarrolló en le centro de La Plata y comenzó a vender cornetas de Argentina para los manifestantes. Lo insólito fue que, para no recibir ningún reclamo, se tomó el trabajo de probarlas una por una.

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La escena es indignante porque precisamente de esta manera es como se contagia el coronavirus, con este contacto estrecho, en este caso con la saliva. El uso del barbijo es para bloquear esta vía de contagio.

En el video, que inmediatamente se hizo viral en las redes sociales, se observa a una pareja que se lleva una de estas cornetas con los colores argentinos, por supuesto haciéndola sonar.