La cartera sanitaria de la ciudad informó que siete personas continúan internadas por el incendio de la semana pasada en Recoleta y que todos permanecen “estables”. Además, que el padre de la familia que falleció en el hecho tuvo una buena evolución en los últimos días, a pesar de que sigue en terapia intensiva con respirador, en el Sanatorio Anchorena.

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"Itzjak Jabbaz tuvo una gran mejora. No respira completamente por sus propios medios, pero sí parcialmente". Allí también confirmaron que el hombre recibió una visita y que "estalló en un llanto de emoción".

Desde el Ministerio de Salud porteño señalaron que ya no quedan vecinos internados en los Hospitales públicos, ya que fueron derivados a sus prepagas u obras sociales correspondientes.

En este sentido, 19 pacientes recibieron el alta en las últimas horas, por lo que muchos aguardan poder regresar a sus casas. Aunque se confirmó que no hay peligro de derrumbe ni problemas con la luz y el gas en los departamentos no afectados, los vecinos todavía no pudieron regresar, ya que no se reinstalaron los servicios.

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El trágico incendio, que dejó cinco víctimas fatales - integrantes de la familia Jabbaz-, fue producto de la “súbita reacción térmica de baterías de litio pertenecientes a un scooter monopatín eléctrico".

Según las pericias realizadas en el séptimo piso, dicha reacción se habría originado "por la sobrecarga, o descargas excesivas, golpes en celdas o bien exposición a fuentes de calor", y ese potencial térmico "se transmitió a los elementos con capacidad de arder".

Este hecho afectó los departamentos 7º y 8º del edificio ubicado en Ecuador 1022, Recoleta. Las grandes llamas provocaron destrozos en ambos pisos y en los pasillos, por lo que por el momento nadie puede ingresar. Las personas que siguen internadas pertenecen a los habitantes de dichos departamentos.

Por Noticias Argentinas