Empresarios de esos sectores expresaron su preocupación por la situación que atraviesan: "Sobran zapatos, pero falta gente que pueda comprarlos", señalaron.
Como casi todos los sectores de la economía que dependen del consumo popular, los empresarios del sector textil y del calzado expresaron que las ventas siguen desplomándose, sobre todo los consumidores usan la tarjeta de crédito para comprar alimentos.
"El problema más importante que tenemos es la caída de la demanda. La gente está comprando comida con tarjeta, no ropa ni zapatos", advirtió Pedro Bergaglio, presidente de la Cámara del Sweater.
En entrevista en el streaming Inteligencia Empresarial, el empresario indicó que desde que se abrieron indiscriminadamente las importaciones se generó un exceso de oferta que el mercado no puede absorber.
En ese sentido, precisó que gracias a las políticas implementadas por el gobierno de Javier Milei "se abrieron más de 14.000 nuevas CUIT de importadores, y hoy el 60% de la ropa que se usa en la Argentina es importada".
De hecho, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) informó que, medidos en moneda constante, los precios de la indumentaria y el calzado bajaron más de un 30% desde 2023, mientras los servicios subieron 53%.