La pelota llevará en su interior una unidad de medición inercial que enviará un paquete de datos a la sala de video. Esto comenzará a aplicarse desde el próximo Mundial de futbol en Qatar con el fin de poder agilizar aquellas jugadas que involucre los fuera de juego u off side.

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Los datos que enviará la pelota permitirá detectar con absoluta precisión el momento exacto en el que se golpea. Además, la nueva mejora tecnológica irá acompañada de doce cámaras instaladas bajo la cubierta de cada estadio para captar los movimientos del balón y hasta 29 puntos de datos de cada jugador que se tomarán 50 veces por segundo.

Teniendo en cuenta la mezcla de datos de seguimiento de la pelota y las piernas de los futbolistas, la nueva tecnología suministra un aviso automático a la sala de video siempre que reciba una pelota un atacante que se encontraba en posición antirreglamentaria en el momento en que su compañero jugó el balón.

Por otro lado, se creará una animación que se repita en los estadios y en la televisión para lograr una mejor comunicación con el público.

Durante el periodo de prueba del nuevo sistema, se concluyó que las decisiones fueron más precisas y fiables y ayudó a los equipos arbitrales de video a tomar decisiones más precisas y fiables en poco tiempo.

Gianni Infantino: “En la FIFA nos sentimos muy orgullosos de este trabajo y esperamos con ilusión que en la Copa Mundial de la FIFA 2022 el mundo compruebe las ventajas que aporta esta tecnología. La FIFA está decidida a aprovechar los avances tecnológicos para mejorar el fútbol en todos los niveles”, concluyó Gianni Infantino, presidente de la FIFA.