La jueza dictó un embargo millonario y le prohibió salir del país.
El expresidente de San Lorenzo, Marcelo Moretti, quedó procesado por la justicia en una causa que investiga el presunto cobro de coimas para concretar la incorporación de un juvenil a las inferiores del club. Según la investigación, el monto ascendería a los 25 mil dólares. La decisión fue tomada por la jueza Laura Bruniard, tras el pedido de la fiscal Mónica Cuñarro, en un contexto de crisis institucional que incluyó la renuncia de 14 miembros de la Comisión Directiva.
Aunque la jueza Bruniard decidió no dictar la prisión preventiva para Moretti, dispuso un embargo sobre sus bienes por un valor de 38 millones de pesos. Asimismo, la magistrada le prohibió la salida del país mientras continúe el proceso judicial, que busca esclarecer las irregularidades denunciadas durante su gestión al frente de la entidad de Boedo.
En su pedido de procesamiento, la fiscal Cuñarro fue contundente al señalar que el expresidente tenía el deber legal y estatutario de resguardar los intereses patrimoniales de la institución. En sintonía con este planteo, la jueza Bruniard afirmó en su fallo que el procesado hizo todo lo contrario a lo que su cargo le exigía.
El fallo judicial sostiene que Moretti se aprovechó de su condición de presidente y priorizó un interés personal ilegal, actuando de forma dolosa para hacerse del dinero en cuestión. La justicia considera que el exdirigente recibió los fondos y los tomó para sí, configurando un desapoderamiento ilegítimo de los recursos del club.
Para la magistrada, estas acciones representan una apropiación indebida de recursos producida estrictamente en el marco del ejercicio de su función pública dentro de San Lorenzo. El caso ha generado un fuerte impacto en el mundo del fútbol y profundiza la inestabilidad política que atraviesa el club tras las masivas dimisiones en su cúpula dirigencial.
Con este procesamiento, la causa entra en una etapa decisiva para determinar las responsabilidades penales de Moretti. Mientras tanto, el club busca reorganizarse institucionalmente tras el escándalo que salpica a una de sus figuras más recientes en la toma de decisiones.