Timmy McKern conoció al vocalista de Sumo en Escocia donde fueron compañeros en el colegio Gordon Stand. Timmy vino a Hurlingham, y años después recibió a Prodan en la recordada residencia.
Luca Prodan y Timmy McKern habían convivido en un departamento en Londres. Timmy estudiaba fotografía y Luca trabajaba en una empresa de seguridad y ambos compartían la pasión por los recitales. Además, tenían en común ser los «bichos raros» entre los británicos por el hecho de ser extranjeros. Con la muerte de su padre, Mackern retorna a la Argentina.
Leé más: Bono y el guitarrista de U2 interpretan una divertida versión de "Stairway to Heaven"
Era el año 1979, cuando Claudia Prodan, hermana de Luca, decidió quitarse la vida. Tal fue el shock en la vida del cantante que al salir del coma en el que cayó por su adicción a la heroína, se radicó en Argentina. La idea no era venir a vivir al país, sino que venía de visita a ver a un viejo conocido: Timmy McKern, quien le había enviado una carta. Una foto de Timmy con su mujer y un bebé en las sierras cordobesas lo hizo tomar la decisión. Luca no lo dudó, estaba solo, pasando por una profunda crisis y su amigo argentino le tendía una mano. Tomó un avión y llegó a la Argentina en uno de los peores momentos de la historia: dictadura y censura de las expresiones culturales.
Luca estuvo un tiempo en Córdoba con McKern y conoció al guitarrista Ricardo Curtet. Motivado con formar la banda, Prodan volvió a Londres para comprar instrumentos y buscar a su amiga Stephanie Nuttal y pedirle que sea la baterista. A la vuelta ya se hospedó en Hurlingham con la familia McKern que vivía en la calle Canning 1020 (hoy Crucero General Belgrano entre la estación de Hurlingham y Ruben Darío).
En el oeste conoció a Germán Daffunchio (actual cantante de Las Pelotas), cuñado de Timmy que se transformaba en el manager de Sumo; y Alejandro Sokol, amigo de Germán. Y así quedaba completa la primera formación de Sumo: Sokol en bajo, Daffunchio y Curtet, en guitarras, Nuttal, en batería y Luca, en voz.
Con unas grabaciones hechas en Córdoba decidieron volver a Hurlingham, ya que la mayoría de los miembros era de allí y estar en el Gran Buenos Aires les daba la posibilidad de insertarse en la escena under. En febrero de 1982 el pub Caroline de El Palomar fue escenario de la primera presentación de Sumo. Dos meses después tocaron en el Festival Rock del Sol a la Luna ante 20.000 personas en el Club Estudiantes de Buenos Aires, ubicado en la localidad de Caseros.
En medio de la propaganda antiinglesa, Sumo debía mentir acerca del origen de sus miembros para conseguir recitales. Preocupados por su hija en medio del conflicto Argentina-Inglaterra, los padres de Stephanie la presionaban para volver a su país. Y así fue. En abril, Stephanie Nuttal volvió a Inglaterra.
«Recuerdo el asado de despedida en la casa de Hurlingham. Recuerdo todas las emociones cruzadas. La camaradería entre el grupo, familiares, amigos. La bronca y la frustración por un sueño que se rompía. Las lágrimas de Stephanie y la promesa de volver cuando todo pasara. Seguro que Luca también sufría», recordó Alfredo Rosso.
La inglesa fue reemplazada en la batería por Alejandro Sokol. Diego Arnedo, otro músico del barrio, se hizo cargo del bajo. Para ese entonces también se sumaría el saxofonista Roberto Pettinato, quien trabajaba en la revista Expreso Imaginario, donde conoció a Prodan.
De hecho, en su libro autobiográfico “SUMO”, Pettinato recuerda la casa de los Mckern a quienes define como “Aristócratas perdidos en un barrio plano y abierto, que al nublarse viraba al color uva».
«La plaza se llenaba de mosquitos y el cine se veía siempre viejo, a punto de clausura, con un afiche en la puerta que nunca sabías si ya había sido proyectada, si fue la única o si era un estreno de la semana entrante. Hurlingham, entre fábricas de vidrio y dos estaciones de tren: Rubén Darío y Hurlingham mismo».
«Son esos barrios sobre los que, ante una mala cara, el residente te dice ‘Pero hay otra zona que no viste’. Ésa era la zona, perimetrada de altos ligustros, en la que vivían los Mackern. Al tiempo, los Sumo».
«Una película, un film donde se veía el gran portón de doble hoja. Abriéndolo podías escuchar a lo lejos los movimientos del jardinero regando y manteniendo en buena forma los rosales y el resto del jardín que no siempre lucía impecable pero que, al menos era más barato que un trasplante desde las afueras de Londres».
«La familia MacKern, con sus hijos rubios, graciosos, apelotonándose en la mesa para la hora de la leche, saliendo de la piscina riñón, marcando la terraza con sus huellas húmedas, cruzándose con alguno de nosotros, que cada tanto subíamos para usar el teléfono o ir al baño, formaba el rumor de escenas cotidianas que envolvía a esta cruza de ingleses, italianos y argentinos en un clima de virtud, si se quiere».
«A pocas cuadras, las luces agónicas, los puestos de hamburguesas y vino rosado, y una que otra discoteca suficientemente iluminada como para freír, en verano, a aquellos mosquitos».
En 1984 debutó Alberto Troglio en batería y Ricardo Mollo. Al año siguiente, Sumo publicó "Divididos por la Felicidad" y en 1986 "Llegando los Monos". "After Chabón" fue editado en 1987 y se trató del último trabajo de la banda. A esa altura, la salud de Luca ya estaba muy deteriorada, producto de su adicción al alcohol, más específicamente, a la ginebra.
El cantante fue encontrado sin vida el 22 de diciembre de ese año en su habitación de la casa ubicada en la calle Alsina 451, en el barrio de San Telmo.