El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, presentó un plan migratorio para reforzar la frontera con México, ante la posible rescisión en mayo de la norma sanitaria por la que ha estado expulsando a indocumentados durante la pandemia.

El Ejecutivo lanzó esta iniciativa migratoria de seis puntos, pese a que el lunes un juez federal de Luisiana anunció que va a bloquear la decisión del gobierno de acabar el 23 de mayo con el Título 42.

El Título 42 es una medida dispuesta en pandemia por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), durante el mandato de Donald Trump, y que Biden ha seguido.

Funcionarios de la Casa Blanca indicaron que, pese a que están en desacuerdo con la decisión del juez de Luisiana, el gobierno cumplirá con la orden del magistrado cuando sea expedida.

Aun así explicaron que, una vez que el Título 42 sea levantado, el gobierno pretende "expandir de forma significativa" las expulsiones rápidas en la frontera a través del Título 8, que es la norma estándar por la que EE.UU. realiza las deportaciones.

La expansión de esas expulsiones rápidas de indocumentados es uno de los pilares del plan presentado este martes, que también contempla un refuerzo de los efectivos en la frontera, con la suma de 600 más para la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza

Otro de los puntos es reforzar el trabajo con las ONG que puedan acoger a los migrantes después de que sus casos hayan sido tramitados por la CBP y estén a la espera de saber si pueden quedarse en EEUU o serán expulsados.

La administración Biden agregó que este mes intensificó sus esfuerzos contra el tráfico de personas, que, según sus datos, han dejado más de 2.500 arrestos, investigaciones y en el desmantelamiento de su infraestructura.

Asimismo, Washignton trabaja con sus aliados en la región "para crear un enfoque más cohesionado y global" para manejar los flujos migratorios en el continente y recordó que en los últimos dos meses ha firmado acuerdos con Costa Rica y Panamá, y que coopera de cerca con México.